viernes, 21 de enero de 2011

Acercamientos a la Teología del A.T

Teología del A.T. como una disciplina distinta generalmente se considera tener sus origines en J. P. Gabler (1753-1826) quien por primera vez introdujo la distinción entre teología bíblica y teología sistemática en 1787. Aunque la Reforma había devuelto la Biblia a una posición central, escolasticismo católica se había reemplazado por escolasticismo protestante y la Biblia fue utilizada como una mina para textos de prueba para la teología sistemática. La distinción dio una nueva prominencia a la idea que la Biblia contenía su propia teología que se tiene que estudiar aparte de formulaciones dogmáticas de ella.

Siguiendo el Hipótesis Documentario de Wellhausen (en los 1870’s) el acercamiento de “Historia de Religiones” dominó el estudio del A.T. así reduciendo el A.T. a “una colección de materiales de periodos desconectados conteniendo reflexiones israelitas de religiones paganas. Entonces durante este periodo teología del A.T. fue eclipsada por religionsgeschichte.

Solamente fue en la décadas después de la Primera Guerra Mundial que la teología del A.T. empezó a salir como una disciplina distinta y sobresaliendo con la publicación del primer tomo de la Teología del A.T. por Eichrodt en 1933.

1. El Acercamiento Sistemático

Este es el acercamiento tradicional, que se ha prestado de la teología sistemática, agrupando las materiales en tres secciones principales: Dios, Hombre y Salvación. La critica principal en contra a este método es que impone una estructura externa sobre el A.T., últimamente presentando una teología enraizada en el A.T. más bien que la teología propia del A.T.

2. El Acercamiento De Desarrollo

Este intenta considerar la fe y teología del A.T. en diferentes etapas: Patriarcal, Mosaica, Profética, Postexilica. Lo fuerte de este acercamiento es que enfatiza el desarrollo de la fe del A.T. Su debilidad es que se complica por el asunto de fechar la literatura y entonces es difícil practicar con consistencia.

3. El Acercamiento Fragmentario

Este presupone que cada libro/ autor/ fuente refleja su propia teología que no necesariamente armoniza con la de otros. Este acercamiento enfatiza la diversidad del A.T., generalmente a costo de su unidad, tanto en asuntos fundamentales como en los periféricos.

El Problema de un Centro para el A.T.

Como Hasel reconoce, el asunto del ‘centro’ del A.T. se queda como un problema no resuelto para el estudio del A.T. Hay varias escuelas de pensamiento.

1. Posiciones de Centro Simple

Varios teólogos del A.T. han intentado estructurar la teología del A.T. alrededor de un tema organizador. Como base de su acercamiento seccional al A.T., Eichrodt escogió “Pacto” como el principio organizador y integrador. Varios otros le siguieron en esto. Apoyando esta elección es el hecho que Pacto es prominente en el A.T., especialmente en el Pentateuco y la Historia Deuteronómica. El material legal del A.T. se puede ver como las estipulaciones detalladas del Pacto. El Pacto se puede ver como el cemento que mantenía la liga de tribus unida. Los profetas claramente funcionaron dentro de un marco del Pacto, a pesar de la falta del uso de la terminología. Pactos del Medio Oriente Antiguo muestran que el concepto del Pacto fue importante en el mundo secular tan temprano como el periodo de Moisés.

En contra de identificar el Pacto como el centro del A.T., sin embargo, es el hecho que, al igual que con muchos propuestos centros simples, no integra totalmente todo el A.T..- casi todas las teologías del A.T. han tenido dificultades en tratar con los libros sapienciales del A.T.

Se han propuesto otros centros alternativos.- la mayoría identificando algún aspecto de Dios.- santidad, comunión, promesa, presencia, elección.- pero estos o no son suficientemente comprensivos para la rica diversidad de la material del A.T., o son tan amplios que llegan a ser un tópico que es solamente el comienzo del debate.

2. Posiciones de Ningún Centro

Von Rad fuertemente negó la existencia de un centro temático en el A.T., manteniendo que cada libro tuvo su propio centro. Además, en el pensamiento de von Rad, el A.T. presenta no tanto una unidad teológica como una Historia de Salvación (Heilsgeschichte) Las varias teologías del A.T. se mantienen unidas por actualización de las tradiciones históricas. Otros eruditos han seguido a von Rad en negar la existencia de un centro al A.T. R. N. Whybray ni siquiera está dispuesto a aceptar a Dios como el denominador común más bajo, porque dice que “Dios fue percibido de diferentes maneras en diferentes tiempos y por diferentes adoradores” (Citado en Hasel Old Testament Theology: Basic Issues p 161).

3. Posiciones de Centros Múltiples

Algunos eruditos han identificado más que un centro, pero manteniendo algún tipo de relación entre ellos. Centros dúos se han propuesto por Fohrer (Gobierno de Dios y Comunión entre Dios y el Hombre), Smend (Yahweh e Israel), de Vaux (Elección y Pacto). Un triple centro “doxológico- polémico- soteriológico” fue sugerido por Martín-Archard, y un cuádruplo centro (Liberación, Comunidad del Pacto, Conocimiento de Dios y Tierra) por Martens.

4. Posiciones Dialécticas

Siguiendo a Lutero, algunos eruditos han subrayado las polaridades o tensiones dentro de las Escrituras. Westermann señala varias: la palabra/ el hecho divino y la respuesta humana; juicio y salvación (en los Profetas); lamentación y alabanza (en los Salmos); liberación y bendición (para él el dialéctico dominante). Otros han nombrado este dialéctico de otras maneras: “providencia-elección” (Bruggemann); “cósmico-teleológico” (Hanson).

Otro dialéctico se propone por Terrien.- “Estético-Ético” (o sea práctica ritual-comportamiento moral) y Goldingay identifica aún más (individuo-comunidad; sufrimiento-confianza; Éxodo- Exilio VT 34 2, 1984).

Todos estos son opuestos en tensión dentro del A.T. que ayudan a ilustrar las muchas facetas de la vida y fe humanas, tanto en las Escrituras como en nuestra propia experiencia.

El Problema de Sabiduría

La mayoría de los propuestos “centros” del A.T. se critican por fallar de tomar en cuenta la Literatura Sapiencial.- un problema cercanamente relacionado con la naturaleza de este mismo material.- principalmente individual o universal en punto de vista, más bien que comunitaria y nacional, y teniendo un sabor secular (Proverbios) en distinción a uno puramente religioso (Eclesiastés y Job no se relacionan cercanamente con la religión israelita).

D. A. Hubbard, sin embargo, ha mostrado (TB 17, 1966) como sabiduría se integra en la vida de Israel.

i. Con la monarquía.- sabiduría floreció bajo Salomón y otros patrones reales.- la monarquía siendo establecida bajo las condiciones del Pacto.

ii. Con profecía.- técnicas de sabiduría (ejem. Parábolas) fueron utilizadas por Natán, Amós, Isaías, Ezequiel etc. Jeremías y Ezequiel también enfatizan el papel del individuo.

iii. Con Torah.- compare parecidos entre Deuteronomio y Prov 1-9, ambos tienen un estilo didáctico rotatorio.

iv. Con el culto.-muchos de los modelos de sabiduría (ejem acrósticos) se reflejan en los Salmos.

v. Con la historia.- en narraciónes israelitas en cortes extranjeras se presentan como sabios de excelencia.

Así, aunque la literatura sapiencial tiene un punto de vista diferente, no está en contra del Pacto y el tema de sabiduría está integrado, por lo menos implícitamente, en la fe de Israel.- “el temor de Jehová es el principio de la sabiduría”.

Asuntos Cruciales Hoy

Uno de los asuntos cruciales es si teología del A.T. es simplemente descriptiva o es de alguna manera una iniciativa normativa, el anterior siendo solamente interesado en “lo que significó el texto” y el posterior también interesado en “lo que significa” (según K. Stendahl, un abogado del acercamiento de descripción). La dicotomía de Stendahl, sin embargo, está problemática, y ha sido criticado de varios perspectivos. Childs ha indicado que “cuando visto desde el contexto del canon, ambos... se enlacen inseparablemente y ambos pertenecen a la tarea de la interpretación de la Biblia como Escritura” (Biblical Theology in Crisis p 141). Otros han hecho observaciones similares.

Un asunto más recién, pero cercanamente relacionado.- surgiendo a fines de los 1980’s.- es la cuestión de teología del A.T. desde un perspectivo judío. (Teología del A.T. es una disciplina en que eruditos judíos tradicionalmente no han mostrado interés.- no hay ninguna teología del Tanak.) Eruditos judíos contemporáneos se dividen sobre este asunto, algunos arguyendo en contra de la idea de una teología del A.T. judía (ejem Tsevat insistiendo que la Biblia Hebrea es literatura, no teología) y otros abogando una intentado teología del Tanak (ejem. Goshen-Gottstein, quien comparte la convicción de muchos eruditos.- tantos judíos como cristianos.- que los eruditos no pueden ocuparse en una iniciativa puramente histórica en que es imposible aislarse de sus propias comunidades de fe o tradiciones religiosas.

TEOLOGÍA DEL A.T.

Acercamiento al A.T.

A pesar del hecho que cada base doctrinal evangélica asevera que las Escrituras se componen del Antiguo y del Nuevo Testamentos, muchos cristianos hoy en día se consideran como puramente gente del N.T. y consideran el A.T. un libro cerrado. Si lo utilizan para historias para niños, los Salmos concuerdan con su propia experiencia a veces, y los héroes de la fe son buenos ejemplos. Pero la mayor parte del A.T. está dejado a un lado. Libros como Números, Job, Eclesiastés, Reyes y Ezequiel son dejados relativamente cerrados. El testimonio a esto es la escasez de comentarios sobre el A.T., especialmente a un nivel popular.

¿Por qué es así?

1. El Lenguaje y las Formas de Pensar son Remotos

La sintaxis del lenguaje hebreo es diferente de la del nuestro. Entonces traducciones literales de él son desmañadas y difíciles. A veces una traducción literal da un entendimiento malo. Por ejemplo los Diez Mandamientos se traducen con verbos futuros “no matarás” etc., pero son imperativos “Nunca mate”.

El mundo del pensar hebreo a diferencia del nuestro no es compone de ideas abstractas. Se basa en realidades. Entonces si Dios es fidedigno, fiel y fuerte.- es nuestra Roca. De nuevo hay interés en simbolismo, quizás visto más claramente en Ezequiel, que está muy lejos de la manera en que pensamos nosotros. Entonces estamos confundidos por la gran visión de la gloria de Dios con que se abre el libro.

2. Muchos Pasajes en el A.T. Parecen Inaplicables

Al enfrentarnos con las largas listas de familias, las leyes detalladas de sacrificios, los detalles de la división de la tierra y su ocupación, las familias quienes reocuparon Jerusalén después del Exilio y las condenaciones de las naciones por los profetas, muchas veces les pasamos por alto y buscamos algo más “espiritual”.

3. Muchos Pasajes en el A.T. Parecen Oscuros

¿Porqué necesitamos preocuparnos con las detalles de las leyes dadas a Israel? Algunas de ellas no tienen ninguna pertenencia en el mundo moderno. Es imposible implementarles (por ejemplo el requisito que ropa sea hecho de solamente un tipo de material). Otros pasajes, no importan cuan buena que sean traducidas, son difíciles de entender (por ejemplo la circuncisión de los hijos de Moisés Ex 4:24-25). De verdad, libros enteros pueden ser difíciles de entender. Todos conocemos los primeros dos capítulos de Job, pero ¿quién ha tratado de entender los argumentos detallados acerca de sufrimiento que les siguen, y que son el mensaje verdadero del libro? Podemos estar familiarizados con algunos “textos bonitos”, pero el contexto está más allá de nosotros.

4. Hay Dificultades Morales en el A.T.

Nos enfrentamos con algunas de las acciones de hombres como Sansón o Jefté. Aún un hombre como David no está libre de la mancha del Pecado. Hay los mandamientos por Dios a Israel a totalmente aniquilar a ciertos pueblos. Hay el uso amplio de la pena de muerte por muchos crímenes.- desprecio de padres, ancianos, sacerdotes, por ofensas sexuales, y por trabajar en el sábado.

Todos estos puntos se han unido con la disposición predominante de los tiempos, que le gusta respuestas instantáneas y no le gusta el arduo trabajo involucrado en encontrar el mensaje del A.T. Tenemos el N.T. ¿Qué más necesitamos?

Tales actitudes no son nuevas, y han surgidas en la iglesia en varios tiempos. Hay el rechazo total por Marción, la alegorización de la Escuela de Alejandría y la iglesia en la Edad Media y los textos de prueba del teólogo sistemático que dominaron el siglo XVII. Todos estos se han resultado cuando la iglesia ha sido influida por ideas mundanas, o sea filosofía griega o racionalismo alemán.

También ha habido los.- la Escuela de Antioquia, los Reformadores.- quienes han usado una interpretación más literal del A.T. y tratado de enfatizar la importancia de tratar el A.T. históricamente como un registro verdadero del trato de Dios con los hombres. Hay la necesidad de enfatizar esto de nuevo en nuestro tiempo.

¿Porque debemos estudiar el A.T.?

1. Es Escritura Cristiana

Es la Biblia que Cristo aprendió como niño y enseñó en su ministerio. Es la Biblia de la iglesia primitiva. Son las Escrituras que Timoteo conocía desde su niñez y eran capaces de hacerle sabio para la salvación. Son inspiradas por Dios y útiles para enseñar, para redarguir, para corregir y para instruir en justicia a fin de que el hombre de Dios sea enteramente preparado para toda buena obra. Las cosas que ocurrieron en el A.T. son ejemplos, escritos como advertencias para nosotros sobre los cuales el cumplimiento de los siglos ha llegado. Vemos a la iglesia primitiva utilizarle vez tras vez en sus sermones y enseñanzas. En un sentido esto debe ser el fin del asunto. Pero lo sacaremos más ampliamente.

2. El A.T. es un Libro de Teología

El A.T. a solas está lleno de teología. Aquí nos encontramos con:-

Dios.- el Creador y todas sus gloriosas obras. Aquí podemos ver su poder, majestad, santidad, justicia y juicio severo. Aquí encontramos su amor, gracia y paciencia frente a pecaminosidad humana.

El Hombre.- la creación especial de Dios, su rechazo pecaminoso de la autoridad de Dios, y la calamidad resultante de la ira de Dios sobre el hombre y la creación.

Salvación.- la larga historia de Dios rescatando a un pueblo y revelándose a si mismo y sus planes a ellos y por ellos.

Todas estas verdades son fundamentales a todas las Escrituras. Muchas de estas se tratan en un detalle no posible en el N.T. Podemos tomar la doctrina de Dios. Es en el A.T. que se encuentra su desarrollo más pleno. El Dios y Padre del Señor Jesucristo no es nadie menos que el Dios del A.T. El a quien él revela más plenamente se describe para nosotros ya en el A.T.

Hay otros temas que no se tratan en el N.T. pero que se enseñan en el A.T. con profundidad, Justicia Social, el control soberano de Dios sobre las naciones, los problemas de sufrimiento y sexualidad.

3. El A.T. es un Libro de Historia

La verdad se presenta a nosotros en la forma de caracteres de la vida real.- hombres y mujeres comunes, sujetos a pasiones semejantes a nosotros. Leemos de amistades humanas, trabajo, comida, familia, vecinos y tanto más en los Libros de Sabiduría. Vemos la gran verdad acerca de Dios ilustrado en el cuadro de la historia humana. Vemos su gracia en acción al llamar a Abraham, redimir la nación de Israel de Egipto y darles la tierra prometida. Vemos su fidelidad a su promesa que la semiente de la mujer heriría la cabeza de la serpiente, realizada mientras las generaciones pasan.- Set, Noé, Abraham.…David...Cristo. Vemos la enormidad terrible de pecado y el juicio que trae en el Diluvio, la destrucción de los pueblos de Canaan y finalmente en su propio pueblo.- el quitar de Israel y el Exilio de Judá con la destrucción de Jerusalén.

No debemos descuidarnos de entenderlo históricamente, porque aún para los convertidos gentiles ha llegado a ser su herencia histórica. Los cristianos gentiles han llegado a ser por fe los hijos de Abraham y el Israel de Dios. Esto es el misterio que no había sido hecho conocido en otras generaciones como ahora lo es por el Evangelio que los gentiles son coherederos con Israel, miembros del mismo cuerpo y coparticipes en las promesas en Cristo Jesús. Esta actividad salvadora en Cristo es la culminación de todo lo que Dios ha estado haciendo. Está enraizado en y el clímax de la historia del A.T. La historia está escrito para la enseñanza y advertencia de todos los cristianos.

4. El A.T. es un Libro acerca de Cristo

Necesitamos entenderlo cristológicamente. Es como Jesús se entendió (Jn 5:39). La iglesia primitiva también entendió el evento de Cristo a la luz del A.T. Noten las muchas citas utilizadas a explicar lo que ha pasado: “entonces se cumplió lo que fue dicho...”

5. El A.T. es un Libro de Profecía

Tenemos que entenderlo proféticamente. Aquí las palabras de los profetas se cumplen. Se cumplen directa e indirectamente (o sea, un sentido más profundo se da a las palabras del A.T. ej. Mat 2:25 cp. Ose 11:1).

6. El A.T. es un Libro de Tipos

Finalmente esto nos lleva a tipología. Esta palabra viene de la palabra griega TUPOS (TYPOS) utilizada en I Cor 10:6, 11, y significa “ejemplo”. Muchas veces el N.T. usa una persona, institución o evento del A.T. como un ejemplo (“tipo”) de la persona del N.T. o de Cristo mismo. La lista de estos es larga, pero se puede establecer dos características de tipos. Primero un tipo siempre es una persona, evento o institución histórico, no una palabra, frase o idea. Segundo, siempre hay una correspondencia cercana en un punto significado entre el tipo y lo que prefigura (el anti-tipo). “La convicción fundamental que sirve de base a la tipología es que Dios está activo consecuentemente en la historia de este mundo- especialmente en la historia de su pueblo escogido- y que como consecuencia los eventos en esta historia tienden a seguir un patrón consecuente. Un evento entonces puede ser escogido como típico de otro, o de muchos otros.” (J.W. Wenham The Goodness of God)


Conclusión

Así el estudio del A.T. es esencial para nuestra apreciación plena de la verdad de las Escrituras. Su teología es un fondo esencial para nuestro entendimiento del N.T. El estudio de su idioma y el contenido que da a palabras también es esencial. No debemos mirar al mundo griego de la iglesia primitiva para su entendimiento de palabras como justicia, propiciación, expiación, sino al A.T. El Evangelio del N.T. puede traernos claridad más grande y un entendimiento más pleno, pero no nos trae nada nuevo.- tiene que ver con el Evangelio “que él había prometido antes por sus profetas en las santas escrituras” (Rom 1:2). “Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos...” (I Ped 1:10).

PACTO

1. Introducción.-

El concepto de pacto es fundamental para el estudio del AT. R.E. Clements escribe que es el concepto más ampliamente usado para expresar la relación entre Yanweh e Israel. “Provee el recuento teológico más completo y considerado de la relación Dios-nación que presenta el AT”. D.J. McCarthy establece similarmente, “El pacto es tan importante en las escrituras en la forma de “testamento”, que ha dado título al libro”. Desde el siglo 2 DC la iglesia ha llamado consistentemente a las dos partes de esta literatura sagrada los AT y NT o pactos. Esto indica la importancia dominante que siempre ha tenido la idea del pacto en la teología bíblica y no simplemente desde la reforma. El término hebreo ber´ith ocurre 251 veces en 27 de los 39 libros del AT. Los 12 en los que no está son cortísimos, los rollos 5 y 7 de los profetas menores. En otros tres libros ocurre en referencia a pactos humanos, Job, Proverbios y Amos. Ber´ith se puede referir a pactos humanos pero predominantemente se refiere “al” o “el” pacto entre Yahweh u Su pueblo.

Muchos otros términos o expresiones aluden asimismo al pacto. Esto es cierto particularmente del hesed de Dios, que significa amor cariñoso o amor fiel, esto es, pacto de amor. La relación con el pacto es frecuentemente directa, por ejemplo, Exodo 34:6; Deuteronomio 7:9,12; 2 Samuel 7:15; 1 Reyes 8:23; Salmo 103:17; 106:45; Miqueas 7:20. Hesed es asimismo la respuesta debida del pueblo de Dios (Oseas 6:6).

Otra alusión al pacto es la frase “tú serás Mi pueblo y Yo seré Tu Dios”. Se encuentra originalmente en Éxodo y Deuteronomio y hay ecos en Jeremías 24:7, 30:22, 31:1, 32:38, Ezequiel 36:28, 37:27, etc. Esta no es solo una expresión de cuidado cariñoso sino de la relación dentro del pacto. Es interesante notar que las referencias de Jeremías y Ezequiel enfatizan ello como un tiempo cuando el pacto se ha roto y ha llevado al castigo del exilio. Esto enfatiza que el castigo es parte del pacto y no una ruptura de el.

Una alusión más se ve en la frase “Yahweh nuestro Dios” como se usa por ejemplo en la ceremonia de renovación del pacto en Siquem, Josué 24.

Nuevamente, muchos pasajes que tratan con el juicio de la nación lo hacen con la implicación de que esto ocurre como resultado de la ruptura del pacto y que viene provisto por este.

El tema del pacto siempre ha dominado la teología reformada. Fue desarrollado inicialmente por Bullinger y Calvino en el siglo 16 y cuidadosamente elaborado por muchos teólogos holandeses en el siglo 17. Fue más desarrollado desde entonces notablemente en las Américas bajo Hodge y Warfield. En este siglo ha sido la base de los trabajos de G. Vos (Biblical Theology, 1948), J. Murray (The Covenant of Grace, 1954).

El pacto ha sido también un tema importante de la crítica especializada del AT. En particular Eichrodt lo hizo central a su teología del AT (1933 y 1961-7). Para Eichrodt el pacto proporcionó tanto la clave para la unidad y la singularidad de la fe israelita. Fue tanto el centro dominante como la característica definitoria de la religión israelita. Para él la distintiva religión de Israel debe de haber tenido un origen específico que trazó hasta la época del Exodo bajo Moisés. El punto de vista de Eichrodt desafiaba claramente el antiguo punto de vista crítico de Wellhausen de que el pacto era un concepto tardío del siglo 17. Este antiguo punto de vista fue revivido posteriormente por Perlitt (1969). El descubrimiento den 1950 de los paralelos entre pactos MOA paralelos, particularmente los tratados hititas del segundo milenio y ciertas porciones del Deuteronomio, ha recibido mucha atención aunque su estudio es injustamente menospreciado por Nicholson como un “callejón sin salida”.

Así, aunque el concepto del pacto y su importancia en la teología es ignorado por muchos cristianos hoy en día o su uso es limitado a una explicación teológica del bautismo infantil, es central en el AT y por supuesto en toda la escritura.

2. El término hebreo.

a) Definición.

“En el uso del AT, un berith significa una alianza de amistad, ya sea entre hombres o entre Dios y el hombre, inaugurada solemnemente, ya sea por palabras solamente o por palabras y ceremonias simbólicas, en las cuales se toman obligaciones en uno o ambos lados. Las obligaciones están frecuentemente acompañadas por un juramento y tienen el carácter de promesas solemnes.” (RT Beckwith, Tyndale Bulletin, 38 p.96, 1987).

b) Etimología.

El término hebreo berith es de derivación incierta, conectada más comúnmente con el pronombre asirio que significa enlace (berito). Así, la palabra tiene una idea base de enlace vinculante y de común acuerdo. Otra sugerencia, aunque menos probable, es que proviene del verbo hebreo que significa comer. Se llegó a usar por la comida tenida para ratificar el acuerdo. Aquí y en otras partes del estudio bíblico, el uso de la palabra es mucho más importante en determinar el significado que la etimología.

2. Pactos Humanos en el AT.

Hay muchos ejemplos de pactos hechos entre individuos y grupos. Abraham y Abimelec (Génesis 26), Jacob y Labán (Génesis 31), Jonatan y David (1 Samuel 18). En algunos casos la gente acuerda servir a Yahweh: Josué e Israel (Josué 24), Josías y sus súbditos (2 reyes 23), Sedequías y Jerusalén (Jeremías 34) aunque se describe a veces cono un pacto de Yahweh, hablando estrictamente, Yahweh es solo un testigo más que una de las partes del pacto. Es interesante que algunas partes hacen pactos repetidas veces. Jonatan y David hicieron 3 (1 Samuel 18:3, 20:16, 23:18).

El término pacto se aplica también al matrimonio (Malaquías 2:14). Se usa también como una solemne toma de uno mismo (Job 31:1).

Los pactos humanos estaban acompañados por juramentos (Génesis 21:23, 26:28, 31:53, Josué 9:15, etc.). Las ceremonias simbólicas varían. Abraham le dio a Abimelec un regalo (Génesis 21:27) como Jonatan a David (1 Samuel 18:4). Isaac le hizo un banquete a Abimelec (Génesis 26:3). Jacob ofreció un sacrificio e invitó a Labán a comer de el (Génesis 31:54). Ambos levantaron memoriales cono Josué (24:26). Sedequías y los hombres de Jerusalén ofrecieron un sacrificio y caminaron entre las partes (Jeremías 34:18).

3. Pacto de Dios en el AT.

La teología reformada afirma que el pacto divino de gracia es un pacto simple que se da y confirma en diferentes épocas en términos ligeramente diferentes. Recientemente McComiskey ha variado en algo esta postura (Los pactos de la promesa). Arguye que junto con un pacto permanente de gracia hay diferentes pactos administrativos y eras diferentes.

Las epístolas del NT se refieren a los pactos del AT. Israel tuvo el privilegio de los pactos (Romanos 9) mientras que los gentiles eran extranjeros a los pactos de la promesa (Efesios 2:12). Para el presente, por lo tanto, consideramos la pluralidad de los pactos y luego discutimos su interrelación.

a) Pacto Noáico: Génesis 6:18, 9:8-17

Este es un pacto hecho con Noé en nombre de todas las criaturas vivientes. Dios promete estaciones regulares y no más futuras destrucciones por diluvios. Incluye mandamientos (9:4-7), el comer de carne sin sangre, la responsabilidad de la sangre y vida de hombres y animales junto con la pena capital por al vida y sangre del hombre. Hay asimismo un mandato de ser fructíferos y multiplicarse. Fue instituido con sacrificios (8:2-22) y tiene la señal del arco iris (9:12-17).

b) Pacto Abrahamico: Génesis 12:1-3,15,17,22:15 ss

Este fue un pacto de dos partes hecho con Abraham. Primeramente la promesa concierne a los descendientes y a la tierra. En segundo lugar se refiere a los descendientes que serán la bendición de todas las naciones (12:3,22:18). Fue instituido por sacrificio (9:15). Tenemos en 17:1 lo que alguien ha denominado un breve pero comprehensivo mandato. El capítulo 22:18 sugiere que hubo una confirmación del pacto por la obediencia de Abraham. Básicamente, sin embargo, la promesa es incondicional. El señal del pacto era la circuncisión (17:9-27).

c) Pacto Mosaico: Exodo 19-24, Deuteronomio 30:1-6

Este era un pacto hecho con el pueblo redimido de Israel, el pueblo que Dios había comprado por sangre de la esclavitud de Egipto. Sobre la base de esta redención Dios se obligó a ellos y ellos a El a ser un “pueblo especial”. Fue establecido después del Éxodo y tenía que ser re establecido cuando se rompiera (33-34). Es confirmado y se dan más detalles (Deuteronomio 1-30) cuando el pueblo esta por entrar a la tierra. Beckwith sugiere que de hecho hay tres pactos aunque el los trata como uno por la cercana identidad de sus estipulaciones. Este pacto incluye estipulaciones detalladas resumidas en los 10 mandamientos e involucra las relaciones sociales. Fue inaugurado por sacrificio (Éxodo 24:3-8), el señal del pacto era el Shabbat y los otros períodos estipulados de descanso.

d) Pacto Aarónico: Números 18:8-20

Solo Beckwith menciona el pacto con Aarón (compare Jeremías 23:21; Nehemías 13:29; Mañaquías 2:4) y también con su nieto Fineas (Números 25:10-13). En Números 18:19 las ofrendas santas de los israelitas son un pacto de sal ante Yahweh, esto es, son indestructibles como la sal (ver Wenham). Números 15:12 se refiere al pacto de paz de Dios. La elección de Aarón y su ordenación como sacerdote no se describe en lenguaje de pacto, aunque se interpretan como tal las referencias posteriores ya citadas. Este pacto fue iniciado con Aarón y confirmado después de la valentía de Fineas en Sitim. Sin embargo es mejor ver esto como un solo pacto en lugar de dos (como Beckwith). Aarón era el ancestro del sacerdocio Saduceo (1 Crónicas 6:7-15) y tal vez del sacerdocio macabeo (1 Macabeos 2:54).

e) Pacto Davídico: 2 Samuel 7:8-17

Esto solo se denomina pacto en otras partes, pero se hace con mucha frecuencia. David mismo se refiere a el como pacto en 2 Samuel 23:5. En 2 Samuel 7 se usa la palabra “hesed” e implica probablemente un pacto de fidelidad. Aquí no hay mandatos, ni sacrificio ni señal. Note que David ora inmediatamente después que se da el pacto. ¿Implica ello sacrificio?. En Isaías 55:3 se denomina “mi fiel amor prometido a David”. En el libro de Reyes el reino davídico y salomónico se ve como el cumplimiento del pacto abrahámico (1 Reyes 4:20-21).

f) Nuevo Pacto: Jeremías 31:31-34

Esta es la promesa de un pacto futuro con Israel en el que la ley de Dios se escribirá en el corazón de cada individuo que conocerá al Señor sobre la base de que sus pecados han sido perdonados. El medio de este perdón y la señal de este pacto no se especifican. Sin embargo las consideraciones de Jeremías 31 apuntan a los días del Mesías. Asimismo Ezequiel 36:24ss apuntan al retorno de un trabajo del Espíritu Santo en el corazón. Esta es una expansión de la verdad hallada en Jeremías. Este trabajo en el corazón es la señal del nuevo pacto y corresponde a los memoriales humanos o a las señales divinas de los otros pactos: arco iris, circuncisión y Shabbat. Note que Pablo usa esta idea en el NT: la circuncisión del corazón.

Algunos sugieren que hay otros pactos en el AT.

(i) Pacto de Creación:

Dumbrill arguye en “Creación y Pacto” (pp 33-39) que Dios no estableció un nuevo pacto con Noé sino que más bien confirmó uno que ya existía y en el que Dios había entrado por virtud de la creación misma. Sin embargo el verbo usado en Génesis 6:18 no implica que el pacto ya existía. Los argumentos exegéticos y teológicos para un pacto de creación son inciertos.

(ii) Pacto de Obras

Algunos teólogos reformados se refieren a este como hecho con Adán (Hodge, Systematic Theology II, 117). Dios entró en un pacto de vida con Adán. Si él hubiera obedecido a la perfección durante un período de prueba habría entrado en la vida prometida. El apoyo para ello es Oseas 6:7. Sin embargo tal uso del término pacto no está en relación con el uso general del AT, esto es, se aplica a una relación única en la era de la inocencia. Más aún, Oseas 6:7 puede significar: como Adán; como la humanidad; o un lugar llamado Adán (compare con Josué 3:16, el primer lugar alcanzado al cruzar el Jordán). Muchos especialistas sostienen el punto de vista último porque la palabra en la siguiente línea, la mención de otros pueblos en los versos 8-9 y la constante denuncia del pecado de Israel por parte de Oseas. Este punto de vista implica cambiar dos letras muy similares. Aparte de este verso disputado no hay otras referencias al pacto antes de Noé.

Podemos preguntar si la promesa de la simiente en Génesis 3:15 es un pacto hecho con Adán. Podemos notar que nunca se refiere como tal en la escritura. De hecho la promesa no es hecha a Adán o Eva sino a la serpiente.

Conclusión

Hemos identificado seis pactos en el AT: Noéico, Abrahámico, Mosaico, Sacerdotal, Davídico y los futuros Nuevos Pactos. Los pactos divinos se inauguran de manera similar a los pactos humanos; algunos se establecen simplemente por declaración divina (2 Samuel 7), otros involucran sacrificios. En Génesis 15 partió en dos varios animales y posteriormente vio un fuego humeante y una antorcha ardiente, representando a Dios mismo, pasar entre las piezas (notablemente lo hace solo, no Abraham, indicando la iniciativa divina al establecer el pacto). El sacrificio inauguró asimismo el pacto Mosaico. Aquí hubo una cena de pacto (Exodo 24:11).

4. Relaciones entre los Pactos.

El pacto noéico fue con toda la creación, Noé es el representante de la creación. Como tal tiene un alcance más grande de todos los pactos del AT. Es asimismo para siempre, “mientras dure la tierra”.

Los pactos abrahámico y mosaico se hicieron con el pueblo elegido de Dios. Abraham es el representante que llegará a ser el padre de la nación, de hecho, naciones (17:5-6). Notamos sin embargo que hay una bendición para todas las naciones. Pero encontramos que comienza directamente aplicable a Isaac y a sus descendientes y en particular a un descendiente. El pacto se re establece con Jacob. De Ismael salen los madianitas, edomitas, etc. Pero el pacto no se establece con ellos.

Son los descendientes de Jacob los que reciben al pacto mosaico. De hecho el mismo nuevo pacto se establecerá con Israel y Judá, aunque no será como el pacto que establecí con vuestros padres.

El misterio se reveló en el NT que los gentiles serían incluidos también en este nuevo pacto, han sido injertados en el olivo de Israel (Romanos 11) y han llegado a ser la simiente de Abraham (Gálatas 6:16).

Dentro de esta estructura general se hace un pacto con dos familias: Aarón y David. Se hacen con propósitos específicos.

Note que la relación entre el pacto abrahámico y el davídico y los nuevos pactos es directo. No va solamente por el mosaico.

Esto deja un último asunto para comentar: fueron los pactos abrahámico y mosaico sustantivamente diferentes, en particular fue el primero incondicional y el último condicional? Podemos notar que mientras que el elemento de la promesa es con mucho adelantado en Génesis 12,15,17, hay asimismo la obligación de Abraham de caminar delante de Dios y ser sin culpa (17:1). Se le dice que guarde el pacto, notablemente la seña de la circuncisión (17:9-14). Los incircunsisos serán excluidos, esto es, retirados del pacto familiar. Mientras que este fue un acto simple y no hay detalles estipulados, fue de todas maneras simbólico de fe y obediencia como se indica posteriormente en la ley mosaica (Deuteronomio 10:16; 30:6). Se usa lenguaje simbólico para la obediencia.

A la inversa, mientras que la ley mosaica da estipulaciones en gran medida, estas están precedidas e interrumpidas regularmente por la elección permanente y graciosa de Dios de Su pueblo (Éxodo 19:5; 20:6). El pacto con Abraham fue hecho con uno que era y permanecería fiel. Es enfatizado repetidamente en el pacto mosaico que sus promesas se aplican a los que permanecen fieles (Levítico 26:40 ss; Deuteronomio 6:10-15, etc).

Ya hemos notado que un pacto entre las mismas partes se puede hacer y confirmar en varias ocasiones, por ejemplo, David y Jonatán, Dios e Israel bajo Moisés. Por extensión de esta idea es posible ver los pactos abrhámico y mosaico como uno solo, dado en diferentes épocas y en diferentes etapas. Este es el pacto general de gracia que abarca todo el AT. Este es el tiempo central que va de Abraham a Malaquías. No es el único pacto ya que se hace dentro del pacto noéico y contiene en sí el pacto sacerdotal y el davídico. Es de gran importancia histórica y teológicamente. Sin embargo tanto en el AT como en el NT trazará la dirección desde Abraham a David y a Cristo. Pablo ve al pacto mosaico como el maestro de escuela hasta que vino Cristo. Este es el propósito último de Dios.

lunes, 17 de enero de 2011

Puntos de Vista acerca del Mundo

Todos vemos al mundo desde cierto punto de vista, afectado por nuestra cultura, historia, religión.

Punto de vista acerca del mundo es “como uno interprete realidad” o “un grupo ordenado reproposiciones que uno cree, especialmente proposiciones acerca de las preguntas más importantes de la vida”, o “la totalidad de las respuestas de uno a las preguntas más importantes de la vida”.

¿Qué son las preguntas más importantes?

Metafísica: Lo que se cree acerca de lo más allá de lo físico: ¿hay algo? ¿porqué hay algo, y no nada?

Teológica: Lo que se cree acerca de Dios: ¿hay un Dios?; ¿quién o qué es Dios?; ¿Qué es su relación al universo?

Epistemológica: Lo que se cree acerca de la verdad: ¿qué es la verdad?; ¿se puede conocer la verdad?; ¿cómo se atiene conocimiento? relativismo; objetivismo; subjetivismo.

Ética: Lo que se cree acerca de moralidad: ¿hay leyes morales?; ¿qué es la base para ley moral?; ¿las leyes se aplican a todos?

Antropológica: Lo que se cree acerca del hombre: ¿qué es el hombre en su esencia?; ¿son sus hechos libres o determinados?; ¿es el hombre esencialmente bueno, malo o neutral?; ¿qué pasa después de la muerte?

Es importante que un punto de vista acercadle mundo sea consecuente. Pero en realidad todos somos inconsecuentes en muchas cosas. Por ejemplo, ¿cómo se puede creer en evolución y argüir por moralidad a la luz de la sobrevivencia de lo más fuerte? Subjetivismo no puede exigir moralidad de otros, porque lo que es verdad para me no es necesariamente verdad para ti.

Si un punto de vista es consecuente no quiere decir que es correcto, pero si es inconsecuente es incorrecto.

¿Qué son los puntos de vista acerca del mundo?

1. Teísmo: un punto de vista del mundo que cree que un Dios eterno libremente creó todo lo existente (tiempo, espacio, materia, reinos y cuerpos celestiales) de la nada (ex nihilo) y que continua actuando dentro de la creación en varios grados.

Judaísmo; Cristianismo; Islam

Dios esta fuera de todo y también dentro de todo. Nada más puede estar fuera de todo. O sea Dios no está limitado por tiempo, espacio ni materias.

Metafísica: hay algo, y un Creador infinito es responsable por crear todo lo que hay. El es completamente separado de la creación y creó todo por su propio beneplácito y no por necesidad.

Teológica: Dios es el Creador del universo y él existe más allá de él y actúa dentro de él.

Epistemológica: la verdad es absoluta, tiene su base en Dios, y se adquiere primeramente por revelación general y especial.

Ética: leyes morales existen y se aplican a toda la gente de todos los tiempos, teniendo su base en Dios.

Antropológica: el hombre es creado a la imagen de Dios yencuentra su dignidad en esta imagen.

2. Deísmo: un punto de vista que Dios creó el universo pero no se ha metido en él desde entonces.

Voltaire; Tomás Paine, evolucionistas teístas.

Dios está fuera de todo y no se involucra en la historia.

Metafísica: hay algo, y un Creador infinito es responsable por crear todo lo que hay.

Teológica: Dios es el Creador del universo y él existe más allá de él pero no se preocupa de él más.

Epistemológica: la verdad es absoluta, tiene su base en Dios, y se adquiere primeramente por revelación general.

Ética: leyes morales existen y se aplican a toda la gente de todos los tiempos, teniendo su base en la naturaleza.

Antropológica: el hombre es creado neutral, ni bueno ni malo, y gana su dignidad por sus acciones. Su destino eterno se determina por sus acciones.

3. Panteísmo: “todo” es “dios”, un punto de vista que cree que dios se identifica con el universo.

Hindus, budistas de Zen, Spinoza, algunos ecologistas.

Dios existe dentro del universo y es limitado por tiempo, espacio y materias. Dios es impersonal. No hay ningún concepto de ex nihilo.

Metafísica: todo es una ilusión excepto la unidad de lo Real (Dios).

Teológica: todo es Dios y Dios es todo. Dios es impersonal e inmanente, no siendo en ningún sentido trascendente.

Epistemológica: la única verdad es la que se encuentra en lo Real y más allá de nuestro entendimiento. Experiencia de sentidos y razón son engañosas como se basan en ilusiones.

Ética: leyes morales son parte de la ilusión de esta vida y no tienen ninguna base en lo Real. En Dios no hay ni bien ni mal.

Antropológica: el hombre es parte de lo Real. Auto-realización ayudará a uno deshacerse de karma mala por un proceso de reencarnación hasta que se une con lo Real en Nirvana así perdiendo cualquier sentido de individualidad.

4. Panenteísmo: “todo” “en” “Dios”. Punto de vista que cree que el universo es parte de lo que Dios es, pero no todo lo que Dios es.

Teología de Proceso; teístas abiertos (hasta cierto punto).

Dios esta fuera de todo y también dentro del universo en su esencia. El universo es como parte del cuerpo de Dios. Dios está en el tiempo y está cambiando, porque con el tiempo viene cambio. Así tenemos a un Dios en desarrollo. Esto “explica” ciertas cosas acerca de Dios. Se puede interactuar con Dios. Pero esto baja a Dios. En realidad se redefina la palabra “Dios”.

Metafísica: hay algo, y este algo, el universo, es parte de Dios, y entonces necesariamente existe.

Teológica: Dios es finito y está experimentando cambio y desarrollo junto con el universo. El universo está en Dios, aunque Dios es más que el universo.

Epistemológica: la verdad está desarrollándose y se le adquiere primeramente por medio de la naturaleza.

Ética: leyes morales no existen, como moralidad está cambiando mientras Dios está cambiando.

Antropológica: el hombre es parte de Dios como las células son parte del cuerpo. El hombre vivirá para siempre como parte de la memoria de Dios.

5. Politeísmo: punto de vista del mundo que cree que hay muchos dioses.

Antiguas religiones, Hindus, budistas de Zen, mormones.

Los dioses son inmanentes en el universo. Esta idea socava la realidad de Dios como único. Estos “seres” pueden ser muy poderosos, pero no son dioses en si, porque están limitados por tiempo, espacio y materias.

Metafísica: hay algo, y ha sido desde toda la eternidad.

Teológica: hay muchos dioses finitos que son inmanentes dentro del universo y no son trascendentes sobre él.

Epistemológica: la verdad se adquiere por revelación de las deidades y entonces es relativa.

Ética: leyes morales absolutas no existen como son determinadas por los diosos individuales.

Antropológica: el hombre está aquí por el placer de los dioses y atendrá a una vida después de la muerte basada en la cantidad de placer que trae a los dioses.


6. Pluralismo: punto de vista del mundo que cree que todas las creencias últimamente son verdad, aún si se contradicen.

Postmodernismo, Nueva Era.

Metafísica: todos los puntos de vista anteriores son correctos, basado en la naturaleza relativa de la verdad.

Teológica: todos los puntos de vista acerca de Dios son verdad y describen lo que él es.

Epistemológica: la verdad es relativa. No hay ninguna verdad absoluta y entonces no hay ningún conocimiento absoluta de la verdad.

Ética: leyes morales absolutas no existen como no hay una verdad absoluta. Todas las leyes morales son correctas para individuo (subjetivismo) o culturas (relativismo).

Antropológica: todos los puntos de vista anteriores son correctos, basado en la naturaleza relativa de la verdad.

7. Naturalismo: un punto de vista acerca del mundo que es ateo y cree que la naturaleza es la suma total de toda la realidad.

Marx, Nietzsche, Freud.

Deístas son naturalistas prácticas, pero tienen cierta esperanza en Dios: Ateísmo no cree en Dios pero muchas veces cree que hay un propósito. Nihilistas no creen ni en Dios ni en propósito y resulta en desesperación total.

No hay metafísica ni teología.

Epistemológica: la verdad se descubre en la naturaleza.

Ética: no hay leyes morales absolutas.

Antropológica: el hombre es el producto de la naturaleza.

Hay pruebas de los puntos de vista acerca del mundo.

1. Prueba de la Razón: ¿es razonable?
2. Prueba de Experiencia Externa: ¿se le puede ver ocurriendo en la vida?
3. Prueba de Experiencia Interna ¿se le sienta de verdad?
4. Prueba de Práctica: ¿funciona en la vida real? ¿es consecuente?

INTRODUCCION A LA TEOLOGIA II

La Justificación de Teología como una Disciplina Intelectual

Muchos han criticado teología y teólogos, especialmente mientras el mundo llega a ser más y más secular. Arguyen que es imposible aún decir algo con sentido acerca de Dios. Así Gordon H. Clark empieza su libro In Defense of Theology diciendo “Teología, una vez aclamada como la Reina de las Ciencias, hoy en día a penas se levanta al rango de una criada, muchas veces es despreciada, considerada con sospecho, o simplemente ignorada”. Entonces ¿ Cómo se justifica teología como una disciplina intelectual hoy en día? ¿ Porqué debemos preocuparnos en reflexión erudita sobre el mensaje y el contenido de las sagradas Escrituras? Y ¿ Porqué lo hacemos de la manera particular que la iglesia, (en sus mejores momentos) lo ha hecho en el pasado. Hay cinco razones porque debemos comprometernos en la empresa teológica:

1. El método teológico de Cristo mismo;

2. El mandato de Cristo a su iglesia a discipular y enseñar;

3. El modelo apostólico;

4. El ejemplo y la actividad de la iglesia del Nuevo Testamento aprobado por los apóstoles;

5. La naturaleza misma de las Sagradas Escrituras.

El Método Teológico de Cristo Mismo.

Todos los cuatro Evangelistas muestran a Jesús de Nazaret como entrando profundamente en encuentro de la mente con las Escrituras y sacando de ellas deducciones fascinantes acerca de si mismo. Por ejemplo, en numerosas ocasiones, ilustrado por los siguientes pasajes del N.T., él aplicó el A.T. a si mismo: Luc 4:16-21; Jn 5:46.

Lucas nos informa más tarde que “comenzando desde Moisés y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían” (Luc 24:27 vea 24:44-47). Tal encuentro de su mente tan extensiva en la exposición de las Escrituras involucró a nuestro Señor en actividad teológica en el sentido más imaginable. Es Cristo mismo entonces, quien estableció para su iglesia el modelo y la meta de toda investigación teológica.- el modelo: debemos hacer la exposición de las Escrituras la base de nuestra teología; la meta: debemos llegar por fin a él en todos nuestros labores teológicos.

El Mandato a la Iglesia a Discipular las Naciones

Después de determinar para su iglesia el modelo y la meta de toda teología, el Cristo glorificado comisionó a su iglesia a discipular las naciones, bautizando y enseñando a sus seguidores a obedecer todo lo que él les había mandado (Mat 28:18-20). La Gran Comisión entonces impone sobre la iglesia exigencias intelectuales especificas. Hay la exigencia evangelistica a contextualizar sin transigencia la proclamación del Evangelio para alcanzar las necesidades de cada generación y cultura. Hay la exigencia didáctica a correlacionar los datos múltiples de las Escrituras en nuestras mentes y a aplicar este conocimiento a todo nuestro pensar y conducta. También hay la exigencia apologética, a justificar la existencia del cristianismo como la religión revelada de Dios y a proteger su mensaje de adulteración y distorsión ( vea Tito 1:9). La teología ha surgido en la vida de la iglesia en respuesta a estas exigencias concretas de la Gran Comisión. Entonces la empresa teológica sirve la Gran Comisión mientras trata de explicar de una manera lógica y coherente para los hombres en todas partes la verdad que Dios ha revelado en las Sagradas Escrituras acerca de si mismo y el mundo que él ha creado.

El Modelo Apostólico

El resto del N.T. muestra la misma actividad teológica. Pablo se metía en ella de frente (Hech 9:20-22), y lo hizo más tarde también (Hech 17:2-3, 17; 19:8 vea 20:20-21). Apolo también lo hizo (Hech 18:28).

Pero la carta a los romanos es el ejemplo clásico de este “teologizar” del mensaje del Evangelio. Se puede ver como la carta fluye teológicamente: como se va lógica y sistemáticamente de la situación desastrosa de la humanidad a la provisión por Dios de salvación en Cristo, y entonces a los resultados de justificación, las dos grandes objeciones a la doctrina (justificación por la fe da libertad a pecar y anula las promesas de Dios hechas a Israel como nación), y por fin a la ética cristiana que las misericordias de Dios requieren de nosotros.

El reflexionó sobre y apoyó sus conclusiones teológicas por apelar a conclusiones anteriores, historia bíblica y aún su propia relación personal a Jesucristo mientras desarrolló su percepción doctrinal del Evangelio de Dios bajo la superintendencia del Espíritu Santo. Se ve estas reflexiones y deducciones por toda la epístola. Por lo menos diez veces después de decir una proposición Pablo pregunta “¿ Qué, pues diremos a esto ?”, y procede a “deducir por buen y necesaria consecuencia” la conclusión a que deseó que sus lectores llegasen (Rom 3:5, 9; 4:1; 6:1, 15; 7:7; 8:31; 9:14, 30; 11:7). En el cuarto capítulo el apóstol saca las conclusiones teológicas que circuncisión no es necesario a la bendición de justificación y que Abraham es el padre espiritual de los creyentes gentiles no circuncidados de la observación sencilla basada en la historia del A.T. que “creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia “ (Gén 15:6) unos catorce años antes de que fuera circuncidado (Gén 17:24).- deducciones teológicas notables a sacar en su ambiente religioso y cultural simplemente de la relación ”antes y después” entre dos eventos históricos. Entonces para probar que “aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por gracia” (Rom 11:5), Pablo simplemente apela a su propio estado como un judío cristiano (Rom 11:1), de nuevo una aseveración teológica notable a sacar del simple hecho de su propia fe en Jesús.

El modelo apostólico de exposición de, reflexión sobre, y deducción de las Escrituras apoya nuestra tarea teológica. Si vamos a ayudar a nuestra generación a entender las Escrituras, nosotros también necesitamos deducir y arreglar conclusiones de lo que hemos aprendido de nuestras labores exegéticas en las Escrituras y estar dispuestos a “dialogar” con los hombres. El meterse en, y los resultados de, esta tarea es teología.

La Actividad de la Iglesia del Nuevo Testamento

La disciplina intelectual de teología se apoya mucho en el N.T. Este habla de un cuerpo de verdad salvadora (II Tes 2:15; Rom 6:17; Jud 1:3; I Tim 3:1; 4:7-9; II Tim 2:11-13; Tito 3:4-8). Estos pasajes muestran que aún tan temprano el proceso teológico de reflexionar sobre y comparar Escritura con Escritura, cotejar, deducir y formular dichos doctrinales en formulas credales con el carácter de confesiones de la iglesia ya había empezado. (Se puede ver ejemplos de estos credos en Rom 1:3-4; 10:9; I Cor 12:3; 15:3-4; I Tim 3:16 tanto como las “palabras fieles” de las epístolas pastorales.) Los apóstoles mismos aprobaron esta actividad, ellos mismos participando en ella en respuesta a los problemas de su tiempo (Hech 15).

La Inspiración y la Autoridad Divinas de las Sagradas Escrituras

La Biblia es la Palabra Revelada de Dios. Cristo, el Señor de la iglesia, consideró el A.T. como tal, y dio a la iglesia amplia razón a considerar el N.T. de la misma manera. Todo esto significa que el Dios Trino está allá y ha hablado. Si está allí, entonces debe ser alguien a quien la gente debe conocer. Y si ha hablado a nosotros en y por las Escrituras del A.T. y del N.T., entonces este hecho a solas es suficiente motivo para estudiar las Escrituras. Por decirlo en otros términos, si Dios ha revelado verdad acerca de si mismo, acerca de nosotros y acerca de la relación entre él y nosotros en las Sagradas Escrituras, entonces debemos estudiar las Sagradas Escrituras. Es tan sencillo como eso. No tener interés en el estudio de las Sagradas Escrituras, si el único vivo y verdadero Dios se ha revelado allí, es necesidad espiritual.

Por estas cinco razones la iglesia debe mantener su compromiso a la tarea teológica. Y ninguna ocupación intelectual se probará ser más provechosa al fin que el de adquirir un conocimiento de Dios y sus obras. Tal es el mandato y el ejemplo de Cristo y sus apóstoles que la iglesia no tiene opción. Debe hacer la tarea de teología si va a ser fiel a él. Más bien, lo que debe ser de más preocupación a la iglesia es si, en su tarea teológica, está escuchando tan intenta y sometidamente como debe a la voz de su Señor hablando a su iglesia en las Sagradas Escrituras. En resumen, la primera preocupación de la iglesia debe ser, no si debe o no hacer la tarea teológica, sino ¿ es su teología correcta? O quizás mejor ¿es bíblica?

La Teología debe ser una contemplación de los misterios de Dios en un espíritu de oración. El quehacer Teológico tiene que llevarse a cabo en una atmósfera de adoración.

La Teología viene después de la Fe y su función consiste en explorar la Palabra de Dios que ha suscitado esta Fe.

La Teología es una continuación de la plegaria, un acto de acción de gracias en el que, como escribiera Calvino "conocemos a Dios y nos reconocemos en El".

Cierto que la Teología entraña investigación, pero dado el objeto de su estudio no puede ser nunca un simple ejercicio de la razón, sino una tarea en la que participe todo nuestro ser y en la que el trabajo meramente intelectual siga la adoración en espíritu y en verdad, propia de quienes son estudiantes de la verdad divino. La meditación teológica debe producir el encuentro con Dios, la comunión renovada incesantemente con El; de ahí que sea ejercicio de la fe tanto como la razón, un instrumento al servicio de la comunidad creyente.

La Razón Por la Teología

La verdadera Teología no es nunca mera teoría o simple discurso, es siempre un don de Dios por su Palabra y su Espíritu; se trata de algo dinámico: La verdad de Dios comunicada por su Revelación, que nos alcanza y nos renueva.

Descubrir La Verdad De Dios Es La Misión De La Teología

A encontrar no simplemente conocer a este mismo Dios. En este encuentro Dios me habla de sí mismo y de mí. Tenemos que dejarle decir lo que El es, lo que El quiere, lo que yo soy y lo que espera de mí. La verdadera Teología es como una llama que nos quema y nos ilumina, nos vivifica y nos transforma.

Para que sea así la Teología no puede ser otra cosa que una reflexión de los pensamientos de Dios, una escucha atenta de lo que Dios primero quiere decirnos en su palabra. La Teología Evangélica va a la palabra para sacar todo su contenido y para poder, luego, exponerlo de manera consistente, ordenada y didáctica. Entonces la Teología Evangélica es una explicación actual de la Revelación Bíblica, un reflejo de la verdad revelada y eterna para las necesidades del pueblo de Dios en su peregrinaje histórico.

La Necesidad Por La Teología:

La pregunta ¿Es necesaria la Teología? es importante. ¿Cómo podemos contestarla?

Hay dos razones porque la Teología es necesaria:

A. Para El Crecimiento Espiritual:

"Creced en la gracia, y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo" (II Ped 3:18).

Las escrituras describen a los creyentes en muchas formas diferentes. Somos "bebes" (I Ped 2:2); "Piedras vivas" (I Ped 2:5); "Pámpanos de la vid" (Jn 15:5), a mencionar pocos.

El creyente esta viviendo y es la naturaleza de las cosas vivas a crecer. El crecimiento espiritual viene solamente por la palabra de Dios. (I Ped 2:2). Sin la Teología no es posible crecer en nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

B. Para La Encomienda Evangelizadora:

Según II Cor 5:19-20 somos "embajadores en el nombre de Cristo". Como embajadores en el nombre de Cristo, somos portadores del mensaje del Evangelio. Se impone un aprendizaje a fondo de este mensaje; un dominio profundo y amplio de la totalidad del mismo. Se exige, en suma, del embajador que conozca los documentos de los que es portador y portavoz. ¿Qué impresión causaría un diplomático que no estuviera familiarizado con el contenido de la encomienda oficial de su gobierno?. De la misma manera, es condición indispensable para el cristiano el conocer más y más la Sagrada Escritura en que llega hasta él el mensaje de su Señor.

La ignorancia es la madre de la superstición, no de la devoción. Seremos instrumentos idóneos en el servicio del Señor solamente en la medida en que sepamos manejar "la espada del Espíritu que es la Palabra de Dios" (Efes 6:17).

Entonces es evidente que tenemos necesidad de la Teología.

La Definición De La Teología:

La Teología es la ciencia de Dios. Decimos ciencia de Dios por dos razones:

a. Porque procede de El.

Sin su iniciativa de darse a conocer no podría haber Teología en el sentido estricto del vocablo.

En todas las cosas espirituales Dios toma la iniciativa.

El evangelio empieza con Dios. (Rom.1:1; Efes 2:4).

b. Porque su objeto de conocimiento es la Divinidad.

La existencia de Dios, su carácter; sus propósitos para con el universo creado, para con sus criaturas, para con sus redimidos y para con la historia todas están incluidos en la Teología.

A.H.Strong dice: "La Teología se ocupa no solamente de Dios sino de aquellas relaciones entre Dios y el universo que nos llevan a hablar de creación, providencia y redención".

La Teología es una ciencia porque, como cualquier otra ciencia, ella no crea sino que descubre los hechos ya existentes y sus relaciones mutuas, tratando de mostrar su unidad y su armonía en las diferentes partes de un sistema orgánico de verdad. Los hechos que maneja la Teología y sus relaciones estructurales existentes por sí mismos, es decir: tienen una existencia independiente del proceso mental del teólogo que se aplica a su estudio.

Existe Teología porque tenemos una Revelación previa de parte de Dios. Como decía Carlos Hodge, la Escritura suministra todos los hechos que constituyen el material de estudio; así la Biblia es la fuente de la Teología mientras que Dios es su objeto supremo de estudio.

La Tarea Teológica

Como se describe precisamente la tarea teológica se determinará por el Sitz im Leben del teólogo, gobernado como es por sus propias calificaciones intelectuales, situación socio-histórica, erudición y posición teológica.

Aspectos Generales de la Tarea Teológica

La tarea teológica en general es tanto constructiva como demostrativa, tanto critica como defensiva:

“1. Constructiva en que el teólogo, tratando primeramente con los dogmas en la confesión de su iglesia, trata de combinarles en un total sistemática.- no siempre una tarea fácil, como los enlaces entre muchas verdades que son simplemente dichas de una manera general deben ser descubiertos, suplidos y formulados de tal manera que la conexión orgánica de los varios dogmas llegue a ser clara, con nuevas líneas de desarrollo siendo sugeridas que están en armonía con la estructura teológica del pasado;

2. Demostrativa en que el teólogo no debe por su sistematizar de dogma simplemente describir lo que su iglesia anima a otros creer, sino también debe demostrar la verdad de él por mostrar exegéticamente que cada parte de el está enraizado profundamente en el subsuelo de las Escrituras, ofreciendo prueba bíblica para los dogmas individuos, para sus enlaces, y para cualesquier nuevos elementos que él puede sugerir;

3. Critica en que el teólogo debe dar campo para la posibilidad de un desvío de la verdad en algún punto u otro en los dogmas de su iglesia y en el sistema sistemático que el mismo propone, significando primero que si él detecta errores en cualquier parte, debe tratar de remediarles de la manera correcta, y segundo, si descubre lagunas, debe tratar de suplir lo que falta (“ecclesia reformata, semper reformanda”) ; y

4. Defensiva en que el teólogo, preocupado como está con la buscada de la verdad absoluta, no solamente debe tomar en cuenta desvíos históricos anteriores de la verdad para él mismo evitarles, pero también debe defenderse contra todos los ataques heréticos actuales contra los verdaderos dogmas en el sistema de su iglesia.” (Berkhof Introducción a Teología Sistemática p 58-59)

En cuanto a la tarea de teología sistemática en especial, debe ser (1) comprehensiva, o sea tratar de todas las enseñanzas normales de las Escrituras; (2) coherente, o sea demostrar las interrelaciones de los varios temas, (3) contextual, o sea interpretar cuandoquiera y dondequiera posible, el alcance de doctrina en términos de temas actuales, y (4) conversacional, o sea tratar puntos de vista históricos y contemporáneos.

El teólogo debe animar y ejercer el ministerio de enseñanza en la iglesia y reactivar la función catequética para confirmar tanto iglesia como individuos para que no sean movidos por doctrinas extrañas y finalmente destruidos.

Teología Y La Biblia

La teología trata de fe y las escrituras. La Biblia es la única autoridad para una teología verdadera. En este respecto la ortodoxia se contraste tanto con el Catolicismo romano y el modernismo. El anterior nunca ha dado su lugar correcto a la palabra de Dios como la única regla de autoridad (sola scriptura) pero ha puesto la tradición, decretos de concilios y desde 1870 declaraciones ex - catederas del Papa al lado de esta. El ultimo le ha sujetado la escritura a la ultima autoridad del hombre. En cualquier caso la Biblia es destronada efectivamente, y evangelios falsos proclamados. La primera calificación de un teólogo es que es un hombre salvo. "Un ministerio inconverso no quedará ortodoxo" (A.A.Hodge). Solamente una fe evangélica puede responder a la autoridad y el mensaje de la Biblia y el hombre que tiene tal fe verá de inmediato que cualquier repudiación de la autenticidad de la historia bíblica le lleva inevitablemente a una repudiación de la autenticidad de Cristo que dio esa palabra.

La teología esta atada por la palabra en esto esta su libertad y vitalidad porque mientras la verdad de las escrituras es constante nunca es estancada y la teología que trabaja en respuesta gozosa y obediente a la palabra nunca fallará a ser dinámica y nunca fallará a ser pertinente.

Teología Y Los Credos

La mayoría de las iglesias reformadas son iglesias confesionales, eso es, se han comprometido oficialmente a ciertos credos. Los dirigentes deben firmar dichos credos.

Los credos son la articulación humana de las iglesias de la verdad revelada en las escrituras. Definiciones credales son mayormente moldeadas en el contexto de la situación en que son preparados, son afirmaciones positivos de la verdad bíblica pero son definidos en reacción conciente a los errores prevalecientes al tiempo de su formulación. Defienden posiciones bajo ataque por contra afirmaciones positivas.

La teología reconoce el valor apologética de los credos pero se queda conciente del peligro, de exaltar las varias afirmaciones confesionales a un estado de infalibilidad. A hacerlo es violar el corazón mismo de las grandes confesiones reformadas y fallar de apreciar la actitud de los teólogos quienes los escribieron a la Biblia y a su propia articulación de la verdad bíblica. Nunca fue la intención de tales hombres elevar afirmaciones credales al nivel autoritativo de la revelación divina.

Valiosos y necesarios como son los credos siempre son confesiones humanas y falibles de la fe. Entonces la palabra de Dios tiene prioridad constante sobre los credos y sigue como la única norma de la iglesia. La teología no puede reconocer ninguna otra norma. Lealtad a los credos siempre debe ser una lealtad a las verdades reveladas que le explican en una forma sistemática. Los credos siempre son subordinados a ese mensaje son mantenidos honorablemente cuando son reconocidos como documentos humanos, siempre sujetos a la piedra de toque de la palabra de Dios. Proclaman lo que la iglesia en cada generación entendía ser el evangelio de las escrituras. Así que la teología siendo completamente atada por la palabra reconoce el carácter humano de todos los credos y confesiones no comete la idolatría de poner los credos como iguales con la Biblia y sin embargo no es tan ingenuo como imaginarse que porque un hombre profesa crear la Biblia necesariamente acepta la doctrina cristiana. Muchos miembros de las sectas modernas hacen esta profesión.

La teología es rápida en respetar los credos históricos como afirmaciones concisas de la verdad de las escrituras y así son aceptados como basados en y de acuerdo con la palabra de Dios y entonces de gran valor practica a la iglesia cristiana.

Las iglesias reformadas han heredado algunos excelentes credos, y por supuesto no podemos aceptar estos símbolos como simplemente señas por el camino que la iglesia ha viajado, teniendo significado y valor por un día pasado pero ya no verdades para nosotros. Esta es una actitud liberal y es consistente con el rechazo antropocéntrico de liberalismo de la infalibilidad de las escrituras y su rechazo consiguiente de teología proposicional. Al otro lado necesitamos enfatizar que un credo solamente puede tener una autoridad subordinado y derivada para la iglesia; no tiene ninguna autoridad intrínseca esta pertenece solamente a las escrituras.

Dada esta actitud a los credos la teología esta dejado libre a escuchar y responder a la palabra, siendo consciente al hecho que nueva luz y fresca verdad puede todavía salir de la palabra de Dios. Los credos no son ni exhaustivos ni finales. La palabra de Dios habla nuevamente a cada generación en su situación especial y escuchando esa palabra la teología, como en el pasado seguirá a dar testimonio por Cristo. Como la iglesia se enfrenta con nuevas situaciones y nuevas amenazas al evangelio así debe proclamar la antigua verdad de aquel evangelio en una nueva manera que esta pertinente al momento. Ningún credo, no importa cuan grande, debe ser considerado como el último hito en la historia de la iglesia. Solamente necesitamos pensar en la filosofía existencialista hoy en día para ver que hay una constante necesidad para la teología, no a ajustar su mensaje, sino a hacerlo pertinente a su ambiente. No solamente debe la teología constantemente escuchar la palabra de Dios pero debe constantemente decir lo que escucha.

Teología Y El Pulpito

Hemos visto que la teología es llamada a un constante y obediente escuchar a la palabra de Dios; que esta atado por la palabra; que porque esta atada por la palabra de Dios esta gloriosamente libre y dinámica; y hemos visto que la teología debe decir lo que escucha. El estudio nunca debe ser divorciado del pulpito.

La iglesia del Nuevo Testamento estaba preocupada con proclamación. Los predicadores cristianos primitivos fueron heraldos del rey de los reyes. Proclamaron las buenas nuevas a un mundo cansado. La palabra que predicaron fue una palabra de poder la palabra del Señor. Debe ser igual hoy en día. Una teología fiel y sensible alcanzará desde el estudio hacia el pulpito y habrá una proclamación viva y vital de la palabra de Dios a los hombres. Una teología a que le falta hacer esto no es digno del nombre, ha perdido su camino. Es estéril y sin poder.

Demasiadas veces la idea ha avanzada que un estudio de teología impedirá la predica efectiva del evangelio. Nada podía ser mas lejos de la verdad. Es verdad que el predicador que se limite en su lectura a textos teológicos y poco a poco adquiere la terminología técnica llegará a ser distante de su pueblo. Tal curso es poco menos de desastroso. Es esta tendencia que ha llevado a la idea equivocada que el estudio de la teología impide la franca y sencilla predicación del evangelio. Debemos recordar que los dichos de nuestro Señor siempre eran exactos, siempre profundos, sin embargo leamos que "gran multitud del pueblo le oía de buena gana" (Marc 12:37). El predicador que constantemente escucha la palabra de Dios y responde a aquella palabra en obediencia, mientras se beneficiará del uso de libros de textos, se quedará bajo la influencia de las escrituras, y su exactitud de dicho será igualado por su fervor. La idea que la teología matará todo celo en el pulpito se refute mejor por el ejemplo de tales hombres como Whitefield, Edwards y Spurgeon.

Teología siempre debe ser enfocada en el pulpito si va a cumplir su propósito y no llegar a ser simplemente un ejercicio académico. El gran fracaso de la moderna teología liberal es que es totalmente inapropiada para el pulpito - aparte de su herejía intrínseca. Habla en el lenguaje de la filosofía existencialista, en términos que no pueden ser traducidos en el idioma del hombre común, y aún si pudiera ser traducida así, no esta de acuerdo con la revelación de Dios en las sagradas escrituras.

La gloria de nuestra fe evangélica es la sencillez que se junta con la profundidad y la fidelidad con que presenta el mensaje bíblico. Uno de los mejores ejemplos de la predicación evangélica se encuentra en los sermones de J.C. Ryle. Son marcados por maravillosa sencillez exactitud teológica y fervor inconfundible.

Entonces la teología esta en punto medio entre la palabra de Dios como su vida y el pulpito como su meta. Vive para servir el pulpito. Es el material del predicador. Una teología que no se puede predicar no es de ningún valor a nadie. Abstracciones vagas nunca disiparán ni ayudarán al hombre en la congregación ni serán utilizadas a llevar a los pecadores al arrepentimiento. Una teología que sigue el camino de deducción lógica y que se arguye que porque esto es verdad entonces aquello debe ser verdad ya se ha desviada y esta yendo hacia una sistema cerrada que no es mas grande que la razón humana y que fallará a satisfacer la necesidad mas profunda del hombre. Esta fría y escolástica. Pero una teología que siempre responde en fe inteligente a lo que esta revelado en las escrituras y solamente declara lo que escucha en las escrituras siempre alcanzará el corazón y la conciencia de los hombres y las mujeres mientras esta aplicada por el Espíritu Santo. Tal teología será el poder y la gloria del púlpito y un arma poderosa en la mano del predicador.

Teología no esta primeramente preocupada con solucionar problemas intelectuales. Un Dios a quien podíamos entender completamente no seria más grande que nosotros mismos. Teología se dirige al contenido del evangelio y por consecuencia continuamente esta alabando a Dios por la gloria de su poderosa gracia. El teólogo que escucha la palabra de gracia no puede faltar en adorar al Dios de la gracia. Teología y doxología andan mano a mano. Vean cuantas veces Pablo, en medio de sus grandes dichos de las doctrinas de la gracia se interrumpe con cánticos de alabanza (cp Efes 3:20,21; Rom 11:33-36 etc)

En una etapa de confusión y grandes conyecturas, necesitamos ser guiados por esa palabra infalible, y a hablar su mensaje salvador a los hombres. Solamente Así, como Pablo antes predicaremos el reino de Dios enseñando acerca del Señor Jesucristo abiertamente (Hech 28:31). Solamente Así nuestro testimonio será verdad y sincero, y solamente así será sencillo y directo. Entonces nuestra teología será parte integra de nuestra predicación. nuestra alabanza y nuestra oración. Llegará a ser una realidad en nuestras vidas, y la palabra que proclamamos será utilizada, por la gracia de Dios, a enseñar a los transgresores los caminos de Dios (Sal 51:13).

La gran necesidad en el púlpito hoy no es por menos teología, sino mas bien por mas teología, o para ser exacto, la teología correcta, porque en realidad cada predicador proclama algún tipo de teología, sea buena, mala, o indiferente. Es el deber y el privilegio de cada predicador ser disciplinado por la palabra de Dios, a ser sujeto a la palabra de Dios y a ser tan dominado por esa palabra, que en el púlpito solamente esa palabra es escuchada, mientras una vez mas el Cristo vivo esta delante de los hombres con el desafió de Su cruz y Su corona.

La Meta de la Teología

Nuestra meta en todo debe ser la gloria de Dios. En el campo teológico ésta se expresa en nuestra actitud.

Debemos tener reverencia para las Sagradas Escrituras como la palabra de Dios a nosotros la última fuente instrumental y norma para fe y vida.

Tengamos pavor como los que han sido dado el gran privilegio de estudiar la “mente de Cristo” revelada en las Escrituras.

Tengamos sobriedad como los que han sido llamados a anunciar la palabra del juicio de Dios a los pueblos del mundo.

Tengamos gozo como los que han sido llamados a proclamar la palabra de gracia de Dios a los mismos pueblos.

Tengamos mansedumbre como los que reconocen que ellos también deben vivir por y bajo esa misma palabra que ellos estudian y aplican a las vidas de otros.

Tengamos coraje a aplicar los entendimientos doctrinales que ganamos de manera atractiva y práctica al vivir cristiano y a un mundo con gran necesidad.

Tengamos preocupación sincera para una evangelización bíblicamente fiel de un mundo perdido, y para la subyugación judicial de las naciones bajo la “equidad general” del gobierno mesiánico actual de Cristo.

Tengamos una dependencia, humilde y con oración, en Dios por todas estas cosas, con la oración perpetua que “sea la luz de Jehová nuestro Dios sobre nosotros, y la obra de nuestras manos confirma sobre nosotros” (Sal 90:17).

Teología Filosófica

Muchas veces las mismas preguntas que hacemos como cristianos se hacen en otras comunidades también. Los filósofos siempre se han preguntado si hay un dios o no, y si hay ¿cómo es? Los cristianos han respondido a tales investigaciones de diferentes maneras. Dependiendo de si han visto un área común entre teología y filosofía o no. Ejemplos de la respuesta positiva a esta pregunta incluyen el análisis patrístico de la naturaleza de Dios en términos de la filosofía griega de su día; las cinco “pruebas” por la existencia de Dios desarrolladas por Tomás Aquino a base de ideas aristoteliánas; la cristología de escritores del siglo XIX como D.F. Strauss que sacan ideas del entendimiento hegeliano del proceso histórico; y las ideas existencialistas en cuanto a cristología de Rodolfo Bultmann. En cada instante un sistema filosófico se trata como un recurso en el desarrollo de una teología. Algunos teólogos vieron una filosofía como una base segura sobre la cual teología puede edificar.

Pero siempre ha habido una tendencia en contra de esta idea y que rechaza el uso de filosofías seculares en teología. En el siglo II Tertuliano preguntó “¿Qué tiene que ver Atenas con Jerusalén? ¿O la Academia con la Iglesia?” En el siglo XX Karl Barth arguyó que el uso de filosofía de esta manera últimamente hizo la auto-revelación de Dios dependiente de una filosofía particular. Desde una perspectiva evangélica, Cornelio van Til también rechazó la mente caída y pecaminosa del hombre como una base común entre el creyente y el incrédulo, arguyendo que la única área común fue la creación y la gracia común de Dios.

Áreas en Común y Prologómena

Prologomena viene del griego y significa “las cosas que vienen antes”, o sea lo que se necesita decir antes de empezar el estudio de teología en si. Esto es especialmente importante en el área de apologética. Los Apologistas en el siglo II buscaron un área común entre ellos y la cultura alrededor para poder alcanzar a los filósofos griegos.

Desde la Ilustración el mundo ha llegado a ser más y más secular y ya no se puede suponer que los hombres y mujeres creen en la existencia de un dios, mucho menos que tengan conceptos cristianos de él. Muchas veces se tiene que comprobar como alguien puede saber algo de Dios en primer lugar. Hablar de cómo podemos saber algo acerca de Dios llega a ser tan importante que hablar de que podemos saber de él. En tales circunstancias llegó a ser importante saber cuales eran las áreas en común entre cristianos y otros.

Las siguientes ideas son importantes:

F.D.E. Schleiermacher pensó que el área común fue “el sentido de total dependencia”. Teología cristiana interpretó esta emoción básica como “un sentido de dependencia en Dios”, y lo relacionó a las doctrinas de pecado y redención.

Paul Tillich desarrolló un “método de correlación” basada en la idea que los seres humanos se hicieron ciertas “últimas preguntas” acerca de su existencia. Entonces teología analiza la situación de la cual las preguntas existenciales surgen y muestra que los símbolos utilizados en el mensaje cristiano son las respuestas a estas preguntas.

Karl Rahner enfatizó la importancia del deseo humano básico de trascender los límites de la naturaleza humana. Estamos conscientes de un sentido de haber sido hechos para algo más de lo que somos ya, o más que podemos esperar realizar por nuestras propias habilidades. La revelación cristiana supla el “más” a que la experiencia humana señala.

Pero muchos, incluyendo los neo-ortodoxos, han protestado que esto es simplemente reducir teología a las necesidades humanas. Barth declaró que teología no dependía en ningún sentido en ninguna filosofía humana, sino fue autónoma. Dios está perfectamente capaz de revelarse sin ninguna ayuda humana. Así prologomina no significa “las cosas que se necesita decir antes de hablar de teología”, sino “las cosas que se necesita hablar primero en teología”.- o sea la doctrina de la Palabra de Dios.

Cornilio van Til arguye también que la revelación de Dios es auto-autenticadora. A sus oponentes esto parece fideismo, o sea un sistema que se justifica por sus propias normas, que no necesitan ser compartidas o aprobadas por nadie más.

La Naturaleza de Fe

Desde la Ilustración fe es visto como un tipo de conocimiento inferior, algo que se puede aceptar sugestivamente aunque no se le puede probar objetivamente. Pero en la Biblia “fe” tiene que ver con como se conoce las cosas (Heb 11:1-6) y también con la apropiación de la salvación.

Fe y Conocimiento.- Tomás Aquino

Según Aquino fe es un punto intermedio entre conocimiento (Scientia) y opinión. Scientia es algo evidentemente verdad, o que se puede demostrar derivar de algo evidentemente verdad. En cuanto a fe, en contraste, la evidencia no es suficiente a obligar creencia (ej. los Artículos de Fe en los Credos). Para Aquino el objeto de fe son proposiciones acerca de Dios o la fe cristiana. “Tener fe” es aceptar estos artículos como verdades, aún cuando no se les puede demostrar sin duda. El contenido de la fe cristiana es consecuente con la razón humana (vea las cinco evidencias para la existencia de Dios). Pero también es una respuesta a la revelación divina.

Fe y Salvación.- Martín Lutero

Para Lutero la doctrina de justificación por la fe hizo de la fe la piedra angular de su espiritualidad y teología. La Caída fue una caída de fe, que es la relación correcta con Dios (Gén 15:6). Tener fe es vivir según Dios propone que vivamos. La idea de fe en Lutero tiene tres elementos:

1. Fe tiene una referencia personal más bien que simplemente histórica;

2. Fe tiene que ver con confianza en las promesas de Dios (FIDUCIA), una confianza dispuesta a actuar sobre su creencia. Su eficacia no depende de su intensidad, sino de lo fidedigno de él en quien creemos. Es, además, una convicción constante.

3. Fe une al creyente a Cristo

Fe es como un matrimonio.- todo lo que tienen, tienen en común por bien o por mal. Es un compromiso total entre Cristo y el creyente.

Aquino y Lutero Comparados

1. Aquino tiende a adoptar un acercamiento filosófico a fe, mientras Lutero está más religioso.

2. Aquino tiende a considerar fe como relacionada a propuestas acerca de Dios, Lutero la entiende relacionarse a las promesas de Dios.

3. Aquino relata fe a evidencia, Lutero la relata al hecho que Dios es personalmente fidedigno.

4. La idea de Aquino en cuanto a fe es teológica, en que se relaciona a Dios mismo; la de Lutero es más cristológica, por dos razones: primero porque el objeto de la fe es unir al creyente a Cristo, segundo, Cristo es la manifestación histórica, ó demostración de lo fidedigno de Dios a las promesas divinas.

Fe y Razón

Generalmente los teólogos arguyeron que, aunque la razón no trae a los individuos a fe en Dios, sin embargo los creyentes pueden dar razones racionales por su fe en Dios. Así Aquino mostró indicios de la existencia de Dios sacados de la general experiencia humana del mundo, - el mundo refleja a Dios su Creador, (La Analogía de Ser) y sus famosos cinco argumentos para la existencia de Dios.

La Naturaleza de Lenguaje Teológica

Si nuestro lenguaje está limitado, ¿cómo, entonces, podemos describir a Dios?

Analogía

El hecho que Dios creó el mundo significa que hay una “analogía de ser” (analogía entis) entre Dios y el mundo. Por esta razón es legítimo usar entidades dentro del orden creado como analogías para Dios. Al hacer esto, no reducimos a Dios al nivel de un objeto o ser creado; simplemente afirmamos que hay algo similar o correspondiente entre Dios y este ser que permite al último a actuar como una señal a Dios (ej. Dios es Padre, Rey) Revelación divina utiliza imágenes e ideas del mundo cotidiano.- pero no reducen a Dios a este nivel. Al decir “Dios es amor” no lo reducimos a nuestras ideas de amor, sin embargo amor humano refleja algo del amor divino.

Pero ninguna analogía está adecuada en si, entonces la Biblia nos da múltiples analogías que funcionan juntas. Cada una de estas ilumina ciertos aspectos de nuestro entendimiento. Tomadas así nos ayudan a tener un cuadro más completo del tema.

Acomodación

Todos están de acuerdo que Dios se acomoda a nuestras limitaciones al hablarnos. “Dios condesciende y baja a nosotros, acomodando a nuestra debilidad, como un profesor hablando un ´pequeño lenguaje´ a sus niños, o como un padre cuidando por sus propios hijos y adoptando sus maneras” (Origenes). Calvino arguyó que en revelación Dios se acomoda a las capacidades de la mente y el corazón humanos. Pero ¿hasta que punto se entiende esto? (ej. Copèrnicus y el centro del sistema solar fue opuesto por algunos a base de Sal 93:1 etc.)

Compromiso y Neutralidad en Teología

Desde el siglo XII ha habido debate sobre si es necesario tener un compromiso par enseñar teología (Bernardo de Clairvaux) o si fuera una disciplina académica no más (Pedro Abelardo). Todavía sigue el debate. Los argumentos son los siguientes:

1. Separación es necesario por parte del erudito en la búsqueda de la verdad. Esto quita los prejuicios de un compromiso.

2. La teología debe estar dispuesta a hacer preguntas duras en cuanto a su credibilidad intelectual, sus métodos y sus ideas.

Pero hay argumentos a favor de compromiso también:

1. Si algo es verdad, ¿no se debe comprometer con él? Así el argumento de la teología de liberación exige compromiso total en y con la sociedad oprimida. Verdad exige compromiso.

2. Todos tienen presuposiciones. Neutralidad no es posible (Cornelio van Til).

3. Teología cristiana viene como respuesta a la fe de una comunidad, es “fe buscando entendimiento” (Anselmo). Fe implica compromiso. Cristianismo tiene que ver con proclamación, oración y adoración. Estas actividades llevan a teología.- y si un teólogo no proclama la fe, ora a Dios, y adora al Cristo resucitado, entonces no se puede decir que ha entendido el propósito de teología.

Herejía y Ortodoxia

Desde el punto de vista académico puede parecer que herejía es simplemente la opinión del partido que históricamente perdió el debate. Sin embargo, es más que esto. Herejía es algo que preservó la apariencia del cristianismo, pero contradecía su esencia.

Si la esencia distinta del cristianismo es el hecho que Dios nos ha redimido por medio de Jesucristo, y no por nadie más, y de ninguna otra manera, entonces sigue que el entendimiento cristiano de Dios, Jesucristo, y la naturaleza humana debe ser consecuente con este entendimiento de redención. Entonces el entendimiento cristiano de Dios debe ser tal que Dios puede efectuar redención por medio de Cristo; el entendimiento cristiano de Cristo debe ser tal que Dios puede efectuar redención por medio de él; el entendimiento cristiano de la humanidad debe ser tal que redención sea tanto posible como genuina. En otras palabras, es esencial que el entendimiento cristiano de Dios, Cristo, y la humanidad sea consecuente con el principio de redención por medio de Cristo solamente. Así herejía es una forma inadecuada o inauténtica de fe cristiana.

Fuentes de Teología

Como todas las disciplinas, teología usa varias fuentes. Hay debate sobre su identidad y su importancia relativa para análisis teológico. Hablando generalmente se han reconocido cuatro fuentes principales:

1. Las Escrituras

2. La Razón

3. La Tradición

4. La Experiencia

Cada una de estas fuentes tiene una contribución distinta que hacer dentro de la disciplina de teología. Sin embargo, la mayoría de los evangélicos reconoce solamente als Escrituras como la única verdadera fuente de la teología.

Como cristianos creemos que no podemos saber nada acerca de Dios hasta que él nos lo revela. Solamente a base de su revelación podemos hablar de Dios en distinción de especulación. Dios se revela en la creación, la providencia o la historia, y en maneras especiales (hoy en día la Biblia).

Revelación General da conocimiento de Dios el Creador, pero se requiera Revelación Especial para dar conocimiento de Dios el Redentor. (Vea Calvino Institución Libro I.)

1. Las Escrituras

Las Escrituras son textos que son autoritativos para el pensar cristiano. Pero siempre debemos recordar que no son simplemente el objeto de estudio académico: también se les lee y expone dentro del contexto de adoración pública, y son el sujeto de meditación y devoción por parte del individuo cristiano. Esto es porque son la Palabra de Dios escrita.

2. La Razón

La segunda fuente principal a considerarse es la razón humana. Todos han reconocido esta fuente siempre. Como el ser humano es racional sigue que debe usar su razón al hablar de Dios. Pero ha habido tres maneras de hacer esto:

a. Teología es una Disciplina Racional

Esta fue la posición de Tomás de Aquino. El arguyó que teología fue racional (así sus cinco pruebas de la existencia de Dios) pero que también tuvo acceso a fuentes más allá de la razón, o sea revelación. Así la teología se hace sobre la base de razón pero con los materiales de revelación.

b. Teología es la Re-publicación de las Ideas de Razón.

Esta idea fue que el cristianismo es razonable y debe ser capaz de probarse por la razón. Así es reducido al nivel de razón. Lo que no es razonable no debe admitirse. Así también la razón toma prioridad sobre revelación.

c. Teología es Redundante: la Razón Reina

Esta es la extensión lógica del anterior. Si no necesitamos revelación para hacer teología, entonces ¿de qué valor es la teología si no dice nada más que la razón?

Se desarrolló las ideas de Deísmo que decían que el hombre puede tener una idea de Dios por pensar en los atributos adecuados para un dios y proyectarles a infinidad. Así revelación no tiene ningún papel en la teología. En realidad teología no es necesaria. La conclusión fue rechazar todo lo sobrenatural.

Pero el problema interno con este sistema es que nadie está de acuerdo en cuanto a que constituyen principios de “razón universal”. Además ignora la realidad de los efectos de la Caída en la razón humana. La razón, como las demás facultades humanas, se ha dañada por la caída. Así no es capaz de juzgar las cosas de Dios correctamente. Entonces, aún Aquino dio demasiada importancia a la razón en primer lugar.

3. La Tradición

La palabra “tradición” implica no solamente algo pasado de generación a generación, sino un proceso activo de reflexión por él cual ideas teológicas y espirituales son valoradas, evaluadas y trasmitidas. Hay tres acercamientos básicos dentro de la teología:

a. Una Teoría de una Sola Fuente de Tradición

En respuesta a varias ideas equivocadas en la iglesia primitiva se desarrolló un método de interpretar las Escrituras que fue considerado correcto. Esta interpretación “ortodoxa” fue considerada la correcta (Ireneo de Lyons) y así este método tradicional fue la guía para otras interpretaciones. Esta posición fue adoptada por los Reformadores magisteriales para defender la doctrina de la Trinidad, pero también la del bautismo de niños. No elevaron juicio privado sobre el juicio unido e histórico de la Iglesia.

b. Una Teoría de una Doble Fuente de Tradición

En esta posición “tradición” es vista como una fuente separada y distinta de revelación en adición a las Escrituras. Es la posición tradicional de la Iglesia Católica Romana.

c. Un Rechazo Total de Tradición

Esta fue la posición de algunos de los Reformadores Radicales. Estos rechazaron el bautismo de niños, pero también algunos rechazaron las doctrinas de la Trinidad y la deidad de Cristo. Su argumento fue que uno necesita solamente la Biblia y la iluminación del Espíritu Santo. Racionalismo también rechazó tradiciones del pasado, pero sobre la base que cada uno podía razonar por si mismo en cuanto a sus creencias.

4. La Experiencia

Experiencia es un cuerpo de conocimiento acumulado, surgiendo por encuentro a primera mano con la vida (ej. un profesor de experiencia). Pero también se refiere a la vida interna en que uno este conciente de sus propios sentimientos y emociones sujetivos.

Filosofía Existencialista se base en la idea que no solamente existimos, sino también estamos concientes de esto y estamos concientes que un día nuestra existencia terminará con la muerte. Existencialismo es primeramente una actitud a la vida humana que enfatiza la experiencia inmediata de la vida real de los individuos. Pero también es un movimiento desarrollado por las ideas de Soren Kierkegaard. Martín Heidegger en su obra Existencia y Tiempo dio impulso a Rodolfo Bultmann a desarrollar un “existencialismo cristiano” Vio el N.T. en términos existencialistas. Hay dos modelos para la relación entre experiencia y teología:

a Experiencia como Recurso Fundamental

Este punto de vista muchas veces habla de “la experiencia humana común” y ve la teología cristiana como el intento de reflexionar sobre este experiencia común. Además puede proveer una base común con los no cristianos en la experiencia humana. Así apologética puede mostrar que el Evangelio da sentido a la experiencia humana.

Pero, como con el racionalismo, el problema es en encontrar evidencia para una “experiencia fundamental común” por toda la historia y cultura humanas. Experiencias son difíciles de verificar y clarificar. Por esto el segundo método ha sido preferido.

b. Experiencia es algo que Requiere Ser Interpretada

Teología cristiana provee un marco dentro del cual las ambigüedades de experiencia se pueden interpretar. Teología trata de interpretar experiencia. Experiencia es de importancia vital a teología. Sin experiencia teología está empobrecida y deficiente. Pero experiencia misma a solas no puede considerarse como un recurso teológico seguro, tiene que ser interpretada y corregida por la teología.

Lutero da el ejemplo de la cruz. Parecía a los discípulos, y aún a Jesús (Mat 27:46) que Dios no estaba presente. Su experiencia y sus sentimientos no fueron seguros como guías a la presencia de Dios. La resurrección destruye este juicio: Dios estaba presente de una manera escondida que la experiencia entendió por ausencia. Teología interprete nuestros sentimientos, aún hasta el punto de contradecirles cuando estén erróneos. Enfatiza la fidelidad de Dios y la realidad de la esperanza de la resurrección.- aún cuando experiencia parece sugerir otra cosa. Así teología nos da un marco para sacar sentido de las contradicciones de la experiencia.

Agustín también usó teología a interpretar experiencia, esta vez de una manera positiva. Dijo que el sentido humano de no ser satisfecho fue el resulto de los hechos de que somos hechos a la imagen de Dios pero caídos a la vez: “Tu nos has hecho para ti mismo, y nuestros corazones están inquietos hasta descansar en ti”.

F.D.E. Schleiermacher trató de usar experiencia humana como punto de partido en teología. Enfatizó el “sentido de total dependencia” cuyos origines se podría trazar a Dios. Pero Ludwig Feuerbach mostró sus problemas.

Según Feuerbach los seres humanos han creado dioses que encarnen su propio concepto de sus aspiraciones, miedos y necesidades. El “sentido” humano no tiene nada que ver con Dios, es de origen puramente humano, malentendido por una imaginación humana sobre activa.

En respuesta a esta idea necesitamos decir que tenemos una revelación objetiva de Dios. Esto es lo que las Escrituras nos proveen. De verdad usamos nuestra razón al interpretarles, pero la reconocemos como una facultad que Dios nos ha dado. Aunque está dañada por la caída, podemos usarla para formular ideas. Pero necesitamos decir que teología no es especulación sobre Dios como muchos piensan. Más bien nuestro conocimiento es análogo, en las palabras de Agustín, “pensando los pensamientos de Dios después de él”. En otras palabras, nuestra razón, al hablar de teología, solamente puede formular los datos que Dios nos ha revelado. De otro modo Feuerbach tiene razón.- son nada más que nuestras ideas. Aún así, nuestra razón está viciada por la caída y necesitamos admitir que podemos estar equivocados.

Tradición puede ayudarnos. Reconocemos que en la providencia de Dios él ha levantado hombres a quienes él ha dotado para enseñar su palabra. El hecho que ellos han muerto no hace sus obras menos valiosas. Pero también reconocemos que pueden equivocarse. Entonces no son una autoridad absoluta y podemos discrepar con ellos.

Experiencia también es sujetiva y puede equivocarse. Puede representar nuestras ideas, no más. Además es posible para dos personas tener la misma experiencia e interpretarle de diferentes maneras. Entonces no es una fuente fidedigna para la teología cristiana.

Todo esto debe dejarnos humildes delante de Dios, aún en cuanto a nosotros mismos y nuestras propias limitaciones. Teología se debe hacer siempre delante de Dios con un sentido de humildad y reverencia.

Si Dios existe tal como la Biblia nos dice, ¿no tendría derecho de hablarnos con autoridad? Entonces nuestro conocimiento será verdadero solamente en cuanto corresponde a su conocimiento. Razón y experiencia deben someterse a Dios. Si no es así, caímos en el error de Eva. Ella usó su razón para decidir entre Dios y la serpiente. Su experiencia iba a ser la prueba de la autoridad de Dios. Así ella llegó a ser la última autoridad.

Pero nosotros estamos en una peor posición que Eva, porque nuestros corazones son pecaminosos. Necesitamos ser regenerados antes de poder entender a Dios correctamente. Después de todo, teología es moral. No es una ciencia que podemos estudiar “objetivamente”, porque lo más que conocemos de Dios lo más responsables estamos delante de él. Lo más que nos equivocamos al hablar de él lo más culpables somos de idolatría y de hacerle a nuestra imagen.

Entonces, con humildad, pidamos la ayuda del Espíritu Santo en todos nuestros estudios. Que él nos guía en nuestra exploración de las cosas de Dios y nos muestre a Cristo. Que Cristo sea más y más el objeto de nuestra contemplación y adoración en todo lo que hacemos. Y al Dios Trino sea toda la gloria por el privilegio de estudiar teología y así llegar a conocerle mejor a través de su palabra infalible.

INTRODUCCIÓN A LA TEOLOGÍA

Como la palabra misma sugiere, “teología” (del latín TEOLOGÍA, por turno del griego (qeologia teología ) en su sentido amplio habla de discurso racional acerca de Dios ó cosas divinas. Como el esfuerzo inteligente a entender y explicar toda la Biblia, vista como la verdad revelada, “teología” en el sentido amplio abarca las disciplinas del currículo clásico de divinidad con sus cuatro departamentos de teología exegética (o bíblica), histórica, sistemática y practica.

Teología Exegética

Esta disciplina trata de las siguientes cuatro áreas:

1. Fondo:- la apreciación histórica de la Biblia.

Geografía bíblica,
Arqueología bíblica,
Historia del Antiguo Medio Oriente,
Religiones del Antiguo Medio Oriente.

2. Contenido;- la apreciación textual de la Biblia

Gramática hebrea aramea y griega;
Hermenéutica (principios de interpretación bíblica);
Exégesis (panoramas, estudios de libros, pasajes especiales).

3. Publicación:- la apreciación literaria de la Biblia

Introducción General: criticismo textual (bajo), canon;
Introducción Especial: criticismo alto.

4. Verdad:- la apreciación de la revelación de la Biblia

Apologética bíblica;
Teología bíblica.

Estas últimas presuponen que Dios puede ser conocido y que se ha revelado en el pasado y lo sigue haciendo a través de la Biblia. Como evangélicos creemos en la limitación de revelación efectiva a las Escrituras. Esto es en distinción del racionalismo, catolicismo romano, misticismo y las sectas. Hay una revelación general de Dios disponible a todos en la naturaleza, la historia y el corazón (Sal 19:1; Rom 1:20). Sin embargo, la pecaminosidad del hombre le ha cegado a ella (Rom 1:21, 28). Es solamente cuando el Espíritu Santo de Dios ilumina a un hombre por la revelación especial de las Escrituras que la revelación general llegue a tener significado para él (Sal 19:7; 119:8). También nosotros identificamos todas las Escrituras con la revelación, en distinción con puntos de vista de inspiración parcial. Toda la Escritura es la palabra de Dios y entonces sin error en los autógrafos inspirados (Hech 24:14).

Teología Bíblica es la disciplina que examina las enseñanzas del A.T. o del N.T. como desarrollando todavía. Generalmente trata sus varios temas dentro de sus periodos de desarrollo e, inicialmente por lo menos, no trata de investigar que efectos revelaciones más tardes y más plenas tendrán sobre el tema actual. O, de nuevo, teología bíblica trata de revelación como una actividad divina, no como el producto completo de esta actividad.

Así reconoce la progresión histórica del proceso histórica. No se ha completado en un acto exhaustivo, sino se desarrolló en una larga serie de actos sucesivos. Es así porque revelación especial se relaciona con redención. Y redención es sucesiva históricamente, puesto que se dirige a las generaciones de la humanidad viniendo a existencia en el trascurso de la historia. Revelación es la interpretación de redención; entonces debe desarrollarse por partes mientras redención lo hace. Pero los dos procesos no son co-extensivos, porque revelación termina a un punto donde redención todavía sigue, subjetivamente. Revelación acompaña los hechos céntricos-objetivos de redención (los que ocurren una sola vez para todo y por todos). Esto es porque trata de asuntos comunes del mundo y de redención. Pero la Biblia también habla de redención subjetiva-individual (cosas que ocurren repetidas veces e individualmente). Esto es porque continuamente, al lado del proceso objetivo, estaba la obra de aplicación sujetiva.

Teología bíblica también cree en la encarnación de revelación en la historia. Los hechos mismos de la historia adquieren un significado revelador. Revelación por acto está al lado de revelación por palabra.

También se puede observar la naturaleza orgánica del proceso histórico de revelación. Esto es de la semilla al crecimiento maduro. Así revelación, aunque progresiva, es perfecta en cada etapa. Redención avanzaba por épocas. Donde grandes hechos redentores ocurrieron en forma acumulativa, allá el movimiento de revelación se aceleró también.

Teología bíblica se caracteriza por su adaptabilidad. La auto-revelación de Dios a nosotros no fue hecho primeramente por un propósito intelectual. (Aunque, como argüiremos más tarde, la mente verdaderamente piadosa puede, por una contemplación de las perfecciones divinas, glorificar a Dios.) Más bien, como el ambiente semítico del A.T. muestra, es práctico. Así Dios causó su revelación realizarse en el ambiente de la vida histórica de un pueblo. Todo lo que Dios ha revelado de si mismo ha venida en respuesta a las necesidades religiosas prácticas de su pueblo como estos surgieron en el trascurso de la historia.

Teología Histórica

Teología tiene una historia. Teología intenta relacionarse a la realidad alrededor. Es un intento a dar sentido a los recursos fundamentales de la fe a la luz de lo que cada etapa considera los mejores métodos. Esto significa que circunstancias locales tienen un gran impacto sobre formulaciones teológicas. Teología se considera universal en que se preocupa con la aplicación de la acción salvadora de Dios a cada periodo en la historia. Pero también se caracteriza por su particularidad como una experiencia de la obra salvadora de Dios en culturas particulares, y está moldeada por las ideas y limitaciones de personas quienes estaban tratando de vivir el Evangelio dentro de un contexto particular.

Teología histórica es la rama de teología cuya meta es explorar las situaciones históricas dentro de las cuales ideas se desarrollaron o fueron específicamente formuladas. Trata de explicar la conexión entre contexto y teología. Así muestra que no fue ningún accidente que la doctrina de justificación por la fe llegó a ser de significado fundamental al fin del Renacimiento. Muestra como, por ejemplo, el concepto de salvación encontrado en la Teología de Liberación en América Latina se enlace cercanamente con la situación socio-económica de la región.

El cristianismo absorba, muchas veces inconscientemente, ideas y valores de su fondo cultural. Entonces hay un elemento provisional o condicional a la teología. Que no se implica en sus fuentes. En otras palabras, ciertas ideas que muchas veces se han considerado ser ideas cristianas resultan ser ideas importadas de un contexto secular. Un ejemplo clásico es la idea de la impasibilidad de Dios.- o sea, la idea que Dios no puede sufrir. Esta idea viene de los círculos filosóficos griegos. Los primeros teólogos cristianos, ansiosos a ganar respeto y credibilidad en tales círculos, no desafiaron esta idea. Como resultado, llegó a estar profundamente empotrada en la tradición teológica.

El estudio de la historia del cristianismo provee un correctivo poderoso a ideas estáticas de teología. Nos ayuda a ver:

1. Que ciertas ideas llegaron a ser bajo circunstancias muy particulares; y que, ocasionalmente, errores fueron cometidos.

2. Que desarrollo teológica no es irreversible; los errores del pasado se pueden
corregir.

El estudio de la historia nos hace alertos tanto a los errores del pasado como a la manera alarmante en que se repiten en el presente. Demasiadas veces asuntos teológicos se tratan como si el debate empezó ayer. Un entendimiento de cómo llegamos a estar donde estamos es esencial a un debate informado de tales asuntos.

Pero teología histórica no es simplemente una historia de la teología. Más bien es en si teología. Llena el espacio entre la palabra de Dios y la palabra contemporánea de la iglesia por estudiar la palabra de la iglesia en los periodos intermedios. Al hacerlo tiene una función triple. Primero muestra como la iglesia y su palabra, moviendo por los siglos y los continentes, han venido de allá a acá con una continuidad a pesar de cada discontinuidad. Segundo, ofrece ejemplos de la manera en que, y las razones porque, la conformidad de la palabra de la iglesia a la palabra de Dios se ha realizado o transigido en los diferentes siglos y ambientes. Tercero, trae a la iglesia de hoy una acumulación valiosa de ideas duraderas, tanto como consejos y advertencias pertinentes. Entonces juega un papel sustancioso, si auxiliar, que teologías dogmática y pastoral aceptarán, aunque deben tener cuidado en no considerar el papel de teología histórica como equivalente con sus asuntos, lo cual es algo que teología dogmática en particular está tentado a hacer.

Teología histórica, como toda teología, sirve el ministerio y la misión de la iglesia. El teólogo histórico trabaja hacia una meta especifica. Participante en teología, él contribuye, a su propia manera, al entendimiento de la Palabra de Dios y, al forjar de su proclamación en términos contemporáneos auténticos. Así ayuda en la tarea de la iglesia de instruir y edificar sus miembros y recoger a los que todavía están afuera por el ministerio puro y efectivo de la Palabra de Dios por la palabra de la iglesia. Teología histórica no es ningún asunto abstracto, o simplemente teórico o intelectual. No ocurre en un vacío. Como todo lo demás en la iglesia, tiene un papel de siervo. Existe en y para la iglesia, y por media de la iglesia, para el Señor de la iglesia.

Teología Sistemática

Por “teología sistemática” se refiere a la disciplina que contesta la pregunta “¿ Qué es lo que toda la Biblia nos enseña sobre un tema dado ?” En términos técnicos, es el estudio metodológico de la Biblia que ve las Sagradas Escrituras como una revelación completada en distinción de teología del Antiguo Testamento, o Teología del Nuevo Testamento, que se acercan a las Escrituras como una revelación desarrollando. Así el teólogo sistemático, viendo las Escrituras como una revelación completada, trata de entender como total el plan, propósito e intenciones didácticas de la mente divina revelada en las Sagradas Escrituras, y a arreglar aquel plan, propósito e intención didáctica de una manera ordenada y coherente como artículos de la fe cristiana.

Teología sistemática trata como partes integrales del cuerpo total de verdad sagrada de las Sagradas Escrituras los temas teológicas de las Sagradas Escrituras mismas, Dios, el hombre, Cristo, salvación, la iglesia y las últimas cosas. También dentro del área de esta disciplina son la articulación del modelo de vida del creyente (ética personal y social) y la presentación cristiana de la verdad a los que están fuera de la iglesia (apologética).

Teología Práctica

Hay una dimensión pastoral al cristianismo, que generalmente se refleja inadecuadamente en la discusión académica de teología. Muchos piensan que la teología de liberación representa una corrección del énfasis demasiado académico de la teología del occidente. Aquí teología se ve como ofreciendo modelos para acción transformadora, más bien que simple reflexión teórica.

Pero este énfasis académico es un desarrollo moderno. El puritanismo es un ejemplo excelente de un movimiento que puso integridad teológica al lado de aplicabilidad pastoral, creyendo que cada uno fue incompleto sin el otro. Teología encuentra su expresión verdadera en cuidado pastoral y la nutrición de almas.